Listeria monocytogenes es la bacteria que provoca la listeriosis, tristemente de moda en los últimos tiempos.

La bacteria culpable puede estar presente en el suelo, el agua y en el organismo de algunos animales. Se trata de una bacteria muy ubicua, que puede quedarse en las superficies de corte, encimeras, instrumentos y desde ahí contaminar multitud de alimentos. Listeria monocytogenes no es una bacteria muy resistente al calor, pero sí al frío: de hecho, puede crecer incluso a baja temperatura en el refrigerador. Para acabar con ella es preciso cocer a elevadas temperaturas o pasteurizar los alimentos.

¿Dónde podemos encontrar Listeria monocytogenes?

Los productos con más probabilidades de estar contaminados por la bacteria culpable de la listeriosis son:

• La leche cruda.
• Los derivados de leche cruda: quesos no pasteurizados, elaborados con leche fresca, crema…
• Carne de cerdo poco cocinada.
• Productos cárnicos elaborados con carnes contaminadas y no pasteurizados (patés, por ejemplo).
• Embutidos cocidos y curados.
• Algunos pescados.
• Comidas preparadas, listas para consumir, tanto de origen vegetal, como lácteo, marino o cárnico.

La cadena de supermercados Aldi retiró hace unos meses del mercado unas tortitas frescas, refrigeradas, tipo blini, un producto que se elabora con harina, leche, nata y huevo, básicamente. Lo último, una nueva alerta por Listeria en algunos bloques refrigerados de pato, foie gras de pato, etc. de patés Zubía. Esta alerta viene a sumarse a las de los últimos meses sobre listeria: productos cárnicos, quesos, paté... 

Atentos a embarazadas, niños y mayores

Los síntomas más comunes de la listeriosis son gastroenteritis, fiebre, dolor de cabeza, malestar estomacal y vómitos.

La listeriosis puede ser un problema en personas que tienen el sistema inmunológico debilitado (ancianos, niños, enfermos) y, en especial, en mujeres embarazadas, donde puede tener consecuencias muy dramáticas, como han puesto de manifiesto los últimos casos sufridos en España.

La prevención pasa por el control

La prevención exige medidas de control en todas las etapas de la cadena alimentaria, desde la producción agrícola hasta la elaboración, fabricación y preparación de alimentos, tanto en establecimientos comerciales como en los hogares. Solo así podremos mantener a raya esta bacteria tan ubicua y persistente.