Ganglios inflamados: no hay que alarmarse
¿Ganglios inflamados en la axilas? ¿Ganglios inflamados por depilación? No te preocupes, por lo general no es más que la manifestación de que tu sistema inmunitario funciona correctamente, combatiendo algún tipo de infección. A los pocos días, la hinchazón desaparecerá. Si no fuese así, si la zona está roja y caliente y si el ganglio es duro y no puede moverse con el dedo, visita al médico.
En el organismo hay alrededor de 600 ganglios linfáticos, localizados principalmente en zonas como las axilas, el cuello, la nuca y las ingles. Su misión fundamental es defender al organismo, actuando a modo de "campos de lucha" en los que se desarrolla la batalla entre nuestras defensas y los elementos nocivos externos.
¿Dónde se encuentran los ganglios linfáticos?
Los ganglios linfáticos son pequeños órganos nodulares, de pocos milímetros de diámetro, que se encuentran repartidos por todo el cuerpo y que forman parte del sistema linfático.
Los ganglios linfáticos están conectados entre sí a través de pequeños vasos o capilares linfáticos, por los que circula la linfa. En las zonas en las que los vasos linfáticos se ramifican, existe una mayor agrupación ganglionar; es lo que ocurre en el cuello, las axilas y la ingle.
Otros órganos y tejidos como el timo, el bazo, el hígado, el apéndice, la médula ósea y otras pequeñas acumulaciones de tejido linfático (como las amígdalas en la garganta, por ejemplo) también forman parte del sistema linfático.
Ganglios linfáticos inflamados
El sistema linfático tiene una importante función defensiva. En caso de infección, la intensa actividad de los ganglios puede producir su inflamación.
Cuando el sistema inmunitario se encuentra disminuido (inmunodeficiencia), los ganglios linfáticos también pueden inflamarse, mientras que las células cancerosas pueden crear en ellos un nuevo tumor (metástasis).
El sistema linfático asume también otras tareas: interviene en la digestión de las grasas, en el transporte de los nutrientes y sus desechos, y mantiene el equilibrio hídrico del organismo.
¿Qué enfermedad hace que se inflamen los ganglios?
La principal causa por la que aumenta el tamaño de los ganglios linfáticos son las infecciones, ya sea por un virus, una bacteria, un hongo o un parásito.
Pueden estar en relación con un resfriado, una gripe, una otitis o un flemón. Pero también con una herida infectada, una enfermedad de transmisión sexual u otras infecciones, como la tuberculosis.
Otras posibles causas son problemas del sistema inmunitario (lupus, artritis reumatoide, etc.), las reacciones a algún fármaco por problemas de hipersensibilidad y, en algunos casos, debido a la presencia de un tumor.
Te ayudamos a cuidar de tu salud
¿Qué pasa cuando un ganglio se inflama y duele?
La clave para discernir entre una inflamación normal (lo más habitual) o preocupante, es la combinación de varios factores: hay que visitar al médico si:
- el bulto se mantiene durante más de una semana,
- si la zona está roja y caliente,
- si el ganglio está duro, es irregular y no se mueve,
- si se acompaña de fiebre, sudoración, pérdida de peso o dolor en las articulaciones,
- o si el ganglio mide más de un centímetro de diámetro (sobre todo si se trata de un niño).
La localización del ganglio es otro factor a tener en cuenta:
- Si, por ejemplo, se detecta en la zona del cuello es un signo de infección en las vías respiratorias tipo faringitis, resfriado u otitis. Hay enfermedades infecciosas, como la toxoplasmosis, que también se presentan con ganglios en el cuello, aunque en este caso duran más.
- La presencia de un ganglio inflamado bajo la axila supone en la mayoría de los casos un síntoma benigno producido por una inflamación local. Otro tanto pasa con los ganglios de la ingle. Con frecuencia esta inflamación se debe a una infección de los folículos pilosos relacionada con la depilación.
- Los ganglios en la zona de la clavícula son sospechosos y deben controlarse y lo mismo ocurre en el caso de que todos los ganglios del cuerpo estén inflamados, ya que puede ser síntoma de una enfermedad del sistema inmunitario, de una infección grave o, en casos más raros, de un tumor con metástasis.
Pruebas y análisis
Para determinar la causa exacta de su aparición el médico debe hacer un examen exhaustivo, que puede ir acompañado de análisis de sangre.
En el caso de que esto no arroje resultados concluyentes y el ganglio permanezca inflamado, se puede recomendar hacer una ecografía para determinar su estructura o incluso una biopsia, para descartar así que se trate de un tumor.
Biopsia de ganglios linfáticos
Puede realizarse una punción-aspiración por aguja fina (PAAF), mediante la introducción de una aguja a través de la cual se aspira una pequeña cantidad de tejido, o bien una biopsia propiamente dicha, en la que se extirpa parte o la totalidad del ganglio.
La elección de una u otra técnica dependerá de las circunstancias específicas de cada caso: mayor o menor sospecha de malignidad, molestias acompañantes, facilidad de acceso, etc.
En el organismo hay alrededor de 600 ganglios linfáticos, localizados principalmente en zonas como las axilas, el cuello, la nuca y las ingles. Su misión fundamental es defender al organismo, actuando a modo de "campos de lucha" en los que se desarrolla la batalla entre nuestras defensas y los elementos nocivos externos.
¿Dónde se encuentran los ganglios linfáticos?
Los ganglios linfáticos son pequeños órganos nodulares, de pocos milímetros de diámetro, que se encuentran repartidos por todo el cuerpo y que forman parte del sistema linfático.
Los ganglios linfáticos están conectados entre sí a través de pequeños vasos o capilares linfáticos, por los que circula la linfa. En las zonas en las que los vasos linfáticos se ramifican, existe una mayor agrupación ganglionar; es lo que ocurre en el cuello, las axilas y la ingle.
Otros órganos y tejidos como el timo, el bazo, el hígado, el apéndice, la médula ósea y otras pequeñas acumulaciones de tejido linfático (como las amígdalas en la garganta, por ejemplo) también forman parte del sistema linfático.
Ganglios linfáticos inflamados
El sistema linfático tiene una importante función defensiva. En caso de infección, la intensa actividad de los ganglios puede producir su inflamación.
Cuando el sistema inmunitario se encuentra disminuido (inmunodeficiencia), los ganglios linfáticos también pueden inflamarse, mientras que las células cancerosas pueden crear en ellos un nuevo tumor (metástasis).
El sistema linfático asume también otras tareas: interviene en la digestión de las grasas, en el transporte de los nutrientes y sus desechos, y mantiene el equilibrio hídrico del organismo.
¿Qué enfermedad hace que se inflamen los ganglios?
La principal causa por la que aumenta el tamaño de los ganglios linfáticos son las infecciones, ya sea por un virus, una bacteria, un hongo o un parásito.
Pueden estar en relación con un resfriado, una gripe, una otitis o un flemón. Pero también con una herida infectada, una enfermedad de transmisión sexual u otras infecciones, como la tuberculosis.
Otras posibles causas son problemas del sistema inmunitario (lupus, artritis reumatoide, etc.), las reacciones a algún fármaco por problemas de hipersensibilidad y, en algunos casos, debido a la presencia de un tumor.
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¿Qué pasa cuando un ganglio se inflama y duele?
La clave para discernir entre una inflamación normal (lo más habitual) o preocupante, es la combinación de varios factores: hay que visitar al médico si:
- el bulto se mantiene durante más de una semana,
- si la zona está roja y caliente,
- si el ganglio está duro, es irregular y no se mueve,
- si se acompaña de fiebre, sudoración, pérdida de peso o dolor en las articulaciones,
- o si el ganglio mide más de un centímetro de diámetro (sobre todo si se trata de un niño).
La localización del ganglio es otro factor a tener en cuenta:
- Si, por ejemplo, se detecta en la zona del cuello es un signo de infección en las vías respiratorias tipo faringitis, resfriado u otitis. Hay enfermedades infecciosas, como la toxoplasmosis, que también se presentan con ganglios en el cuello, aunque en este caso duran más.
- La presencia de un ganglio inflamado bajo la axila supone en la mayoría de los casos un síntoma benigno producido por una inflamación local. Otro tanto pasa con los ganglios de la ingle. Con frecuencia esta inflamación se debe a una infección de los folículos pilosos relacionada con la depilación.
- Los ganglios en la zona de la clavícula son sospechosos y deben controlarse y lo mismo ocurre en el caso de que todos los ganglios del cuerpo estén inflamados, ya que puede ser síntoma de una enfermedad del sistema inmunitario, de una infección grave o, en casos más raros, de un tumor con metástasis.
Pruebas y análisis
Para determinar la causa exacta de su aparición el médico debe hacer un examen exhaustivo, que puede ir acompañado de análisis de sangre.
En el caso de que esto no arroje resultados concluyentes y el ganglio permanezca inflamado, se puede recomendar hacer una ecografía para determinar su estructura o incluso una biopsia, para descartar así que se trate de un tumor.
Biopsia de ganglios linfáticos
Puede realizarse una punción-aspiración por aguja fina (PAAF), mediante la introducción de una aguja a través de la cual se aspira una pequeña cantidad de tejido, o bien una biopsia propiamente dicha, en la que se extirpa parte o la totalidad del ganglio.
La elección de una u otra técnica dependerá de las circunstancias específicas de cada caso: mayor o menor sospecha de malignidad, molestias acompañantes, facilidad de acceso, etc.