Consejos

Las intoxicaciones no son para el verano

06 julio 2023
Intoxicaciones alimentarias

El calor y el relax del verano son muchas veces el caldo de cultivo idóneo para las intoxicaciones alimentarias. No obstante, en contra de lo que muchos piensan, se producen más en el hogar que fuera de casa. Sigue unos consejos de seguridad alimentaria para limitar el riesgo.

Las intoxicaciones alimentarias son más frecuentes en verano y también suelen ser más graves (una de las principales complicaciones es la deshidratación). Otros veranos hemos asistido a graves casos de intoxicación por listeriosis, por ejemplo.

Atento a las intoxicaciones en casa

Los datos oficiales hablan de una mayor incidencia de las intoxicaciones por consumo de alimentos en el hogar que fuera de él. ¿Cómo llegan a producirse? ¿Por qué se “estropean” los alimentos más en verano?

Es cierto que durante las vacaciones se relajan las costumbres, nos saltamos horarios, comemos fuera, a veces descuidamos algunas medidas de higiene, prolongamos la sobremesa... Además las altas temperaturas propias de la época favorecen el crecimiento de microorganismos en los alimentos y a veces la cadena del frío se rompe con más facilidad.

Intoxicaciones alimentarias verano

Combinaciones peligrosas

La proliferación de los gérmenes se produce por la combinación de tres factores:

  • Elevada temperatura. La mayoría de las bacterias se reproducen de forma óptima a 37º. Para dificultar su proliferación se deben mantener por debajo de los 5º aquellos alimentos que deban estar refrigerados y, por otro, alcanzar al menos los 65º durante dos minutos al cocinarlos. 
  • Nutrientes y humedad. Donde hay restos orgánicos, si además hay humedad, es más fácil que se reproduzcan los gérmenes.
  • Tiempo. Algunas bacterias se dividen muy rápidamente, y en poco tiempo pueden alcanzar un número lo bastante importante como para provocar daños en el consumidor.

10 principios básicos de seguridad alimentaria

El objetivo es, por tanto, evitar que las bacterias peligrosas lleguen a nuestros alimentos y evitar que se multipliquen. Mantener una escrupulosa higiene y la correcta manipulación de alimentos son la forma más eficaz de reducir riesgos. 

Intoxicaciones alimentarias verano

1. Extrema tu higiene personal. Lávate cuidadosamente las manos si vas al baño, si tocas animales, plantas, tierra etc. Y siempre antes de manipular alimentos.

2. Después de cocinar, refrigera la comida cuanto antes, no la dejes a temperatura ambiente, ya que es la más peligrosa.  

3. Si sales al campo o la playa, lleva la comida en recipientes muy limpios y herméticamente cerrados. Mantén fresca la nevera o cesta con la comida, con acumuladores o una bolsa de hielos, o refrigera con agua del mar o río.

4. Las sobras de comida, a la nevera… o a la basura.

5. Deja los alimentos tapados y bien protegidos: así evitarás las visitas de los insectos, que pueden transmitir la intoxicación.

6. Evita la contaminación cruzada: tablas, platos o cubiertos que hayas usado con alimentos crudos, no los utilices otra vez con los cocinados sin haberlos lavado. Usa cubiertos limpios al servir las salsas, ensaladas o guisos.

7. Recalienta solo la porción que se vaya a consumir.

8. En la compra, deja para el final los alimentos que necesitan refrigeración y date prisa para volver a meterlos en frío.

9. Ten especial cuidado con los productos con salsas, con mayonesas, con los asados y con las preparaciones que incluyen alimentos cocinados y crudos a la vez.

10. Si estás en un lugar donde el agua no te ofrezca garantías, tómala embotellada y sin hielo. Ten cuidado en ese caso también con las verduras frescas y los moluscos.

¿Cómo actuar ante una intoxicación?

Recuerda que ante una intoxicación, la clave es la rehidratación.

  • Toma suero comprado o un preparado alcalino casero (con un litro de agua, 1/2 cucharadita de sal y 1/2 de bicarbonato sódico, dos cucharadas de azúcar y el zumo de un limón ).
  • Si el afectado es un niño, un anciano o una persona de riesgo y no mejora en 12 horas, hay que ir al médico. Los adultos sanos pueden esperar un poco más.
  • Si la fiebre es más alta de 38 °C debes ir al médico
  • Si la diarrea o los vómitos son sanguinolentos, también hay que ir al médico
  • Cuando cesen los vómitos, hay que ir empezando a comer algo: una dieta blanda y astringente, arroz cocido, patata o zanahoria cocida, caldos, sopas suaves... Solo cuando esto lo tolere bien se pueden ir introduciendo otros alimentos.