Consejos

Fatiga pandémica: cómo afrontarla

Muchas personas se encuentran cansadas o desmotivadas después de tantos meses de pandemia. Se habla ya de “fatiga pandémica” y no solo afecta a nuestro bienestar psicoemocional. Por ese cansancio podemos llegar a incumplir las recomendaciones para protegernos del coronavirus. 

23 noviembre 2020
cansados del coronavirus

Fatiga por una crisis sanitaria que aún sigue

Hace casi un año que se detectó el coronavirus por primera vez en China. Tres meses después se desencadenó una pandemia mundial en la que aún seguimos inmersos: de eso hace ya nueve meses. Hoy, muchas personas se encuentran cansadas o desmotivadas. Es lo que se ha venido a llamar fatiga pandémica. 

Una etapa compleja

Desde que se inició esta crisis sanitaria hemos vivido situaciones inauditas: un confinamiento domiciliario durante casi tres meses que rompió toda continuidad con nuestra rutina, expectativas, seguridad o planes. En estos meses hemos aprendido a teletrabajar, los niños han ido al cole online, nos hemos visto obligados a mantener el contacto con los nuestros a través de una pantalla… Con la desescalada, nos hemos olvidado de las barras de bar, las fiestas, los conciertos, etc., y hemos aprendido a relacionarnos y a vivir nuestro ocio de otro modo.

Las restricciones a la movilidad volvieron con el otoño y la segunda ola de la pandemia. Afortunadamente las medidas no están siendo tan duras como en la primavera pasada, pero sí se ha limitado la actividad cotidiana y no está claro cuándo va a llegar el final de la crisis

La pandemia afecta a nuestra calidad de vida

Salta a la vista, y los datos y las encuestas lo confirman: el impacto de estas medidas ha sido considerable y ha afectado a muchos aspectos de nuestra vida. Según una encuesta realizada por OCU durante el desconfinamiento, en julio de 2020, el 51% de los encuestados indicaron que el confinamiento había impactado bastante o mucho sobre su calidad de vida, especialmente sobre su vida social (68%) y familiar (44%), o en su situación económica (43%). 

Además, las actividades más restringidas por la pandemia son precisamente las que mayor bienestar aportan según reflejaba otra encuesta de OCU realizada justo antes de que comenzara esta crisis (diciembre 2019), donde se señalaban como las actividades que más placer causaban a los usuarios eran, por ejemplo encontrarse con familiares y amigos (78%), salir a pasear y al parque (74%) o viajar al extranjero por placer (36%).

encuesta covid

¿Estás cansado por la pandemia?

En estas circunstancias es normal sentirse cansado, hastiado o desmotivado como ha indicado recientemente la Organización Mundial de la Salud, que ya habla de "fatiga pandémica" para referirse a este cansancio hacia todo lo relacionado con la pandemia.

Cómo se manifiesta esa fatiga pandémica

  • Menor percepción de riesgo, al acostumbrarse a convivir con el virus y, por lo tanto, a normalizarlo.
  • Pérdida de sensación de control y autodeterminación.
  • Aislamiento y desesperanza.
  • Desmotivación, cansancio, frustración o hastío con la situación en general.

Respecto al primer punto, es lógico (y deseable) que, a medida que van pasando los meses, nos acabemos acostumbrando a esta situación de pandemia, o que notemos cómo desciende el nivel de estrés que se ha vivido en los meses anteriores, aunque, el estrés acumulado junto a la gran incertidumbre que nos rodea son los principales responsables de que surja esta fatiga. 

Una de las consecuencias de esta situación de cansancio es que se pasan por alto las recomendaciones médicas o las medidas preventivas. Nos referimos a la higiene de manos, el uso de mascarilla, el respeto a las distancias, a las limitaciones de reuniones,, etc.

También se pierde el interés por mantenerse informado sobre la situación o sobre las últimas medidas restrictivas o de protección.

Al final, eso puede llevar a prácticas de riesgo y se pone en peligro la salud individual y la de todos.

¿Cómo afrontar el cansancio y la incertidumbre?

¿Es posible manejar el cansancio e incertidumbre que esta crisis genera? Te sugerimos una serie de estrategias que pueden ayudarte a conseguirlo : 

  • Céntrate en lo que sí puedes controlar. Cambiar la situación global o la evolución de la pandemia no está en nuestras manos; habrá cosas que no podremos hacer o que nos pedirán que hagamos de un modo distinto… Es cuestión de adaptarse a esa nueva forma de desenvolverse en el día a día y seguir activos.
  • Trata de ser más tolerante con esta situación. Ahora, además, las noticias favorables de las vacunas arrojan esperanza y luz al final del túnel. 
  • Procura ser flexible para adaptarte a los cambios y buscar alternativas viables. La incertidumbre y los cambios son las “nuevas certezas”. Lo que estamos viviendo es extraordinario. Si asumes que “tus planes” pueden trastocarse en cualquier momento, vivirás los cambios con menos frustración y malestar. 
  • Intenta mantener tu vida activa en la medida de lo posible, sin dejar de respetar las medidas de protección. No dejes de ver a gente, hacer cosas o actividades que te ayuden a sentirte bien, las que ya hacías u otras nuevas que quieras probar. Sabemos que esto va a terminar, pero no cuándo.
  • El día que estés apático, triste o desanimado... tranquilo, date permiso para ello: resulta difícil y puede que se haga largo, pero te mereces un respiro y poder expresar tus sentimientos.

Y recuerda que tu salud y la de todos depende de que sigas las recomendaciones de las autoridades sanitarias. Mantente al día con el especial coronavirus de OCU:

OCU: especial coronavirus