Informe

Haz tu dieta mediterránea

12 mayo 2017
dieta-mediterranea

La dieta mediterránea es algo más que una forma de alimentarse. Se trata de un legado cultural que está integrado por un conjunto de conocimientos, celebraciones, espacios, objetos y modelos alimentarios que los pueblos del Mar Mediterráneo han transmitido de generación en generación durante milenios. Por desgracia, cada vez menos gente sigue el patrón de la dieta mediterránea.

La dieta flexitariana es un movimiento que se ha puesto muy de moda durante los últimos años. Ésta se caracteriza por una alimentación principalmente vegetariana, que permite el consumo ocasional de carne y pescado.

Pues bien, esta manera de alimentarse “tan moderna” describe perfectamente en qué consiste la dieta mediterránea.

dieta vegetariana

¿De dónde venimos y adónde vamos?

Tradicionalmente, la alimentación de los españoles se basaba en el consumo de alimentos saludables para la prevención a largo plazo de enfermedades: se tomaban muchos cereales, legumbres, frutas, verduras y hortalizas; se consumían lácteos, carnes y pescados de manera moderada; se utilizaba el aceite de oliva para cocinar y aliñar; y se bebía vino tinto en las comidas.

Sin embargo, estas costumbres han ido cambiando debido a la diversificación de los productos alimentarios ofertados por una industria cada vez más activa y competitiva. También, los cambios laborales (los trabajadores comen asiduamente en los lugares de trabajo y los niños, en los colegios) y los cambios socioculturales (se dispone de más tiempo de ocio que se disfruta muchas veces en los restaurantes) han favorecido que se haya dejado de lado la dieta mediterránea.

No obstante, es importante recuperar nuestra dieta tradicional y hacer que nuestra alimentación sea más flexitariana.

¿Cómo hacer tu dieta más mediterránea?

Con pequeños gestos, es posible adoptar un estilo de vida basado en la dieta mediterránea y, por consiguiente, conseguir grandes beneficios para tu salud:

  • Los alimentos de origen vegetal deben ser la base de tus menús.
  • Si tomas pan y cereales, mejor que sean integrales.
  • Da preferencia a los productos frescos y de temporada.
  • El aceite de oliva es ideal para aderezar tus platos.
  • Los lácteos son la mejor fuente de calcio.
  • La carne y pescado no tienen por qué estar presentes en todas las comidas.  
  • El agua es la mejor forma de hidratarse, inclúyela en todas las comidas.  
  • Sigue una vida activa. No es necesario ser un gran deportista, pero sí estar en movimiento.
  • Cuida tu mente y sé feliz.