5 ventajas y desventajas de las calderas de gas

¿Tienes que renovar tu calefacción? Pues es normal que te encuentres en un mar de dudas porque el debate sobre qué energía será más sostenible, barata y conveniente para los hogares en el futuro próximo está sobre la mesa. Al elegir un nuevo sistema de calefacción, una de las decisiones básicas que debes tomar es si quieres que funcione con electricidad o con gas. Todos los sistemas tienen sus ventajas y desventajas en términos de costes de funcionamiento, eficiencia, instalación e impacto ambiental.

¿Aerotermia o gas?

Las nuevas normas sobre eficiencia de edificios promueven el uso de las calefacciones que utilizan energías renovables, como la aerotermia, que funciona con electricidad, o la biomasa, que lo hace con pellets, huesos, etc.. La aerotermia y las bombas de calor tienen muchas ventajas y las autoridades desean promoverlas porque aprovechan muy bien la energía que gastan (son eficientes) y no producen emisiones contaminantes. Sin embargo, las directivas europeas no han prohibido poner una caldera de gas si la tuya se ha estropeado o si haces una pequeña reforma en casa. 

Hemos calculado el coste para calentar un piso de 90 m²con aerotermia y con calefacción de gas con los precios de la energía actuales (enero 2024):

• Gas: 0,0511 €/kWh
• Electricidad: 0,1333 €/kWh

Y  la caldera de gas sale más barata, pero la diferencia no es excesiva en términos de coste anual:

Coste de calentar vivienda de 90 m2 (€/año)	Consumo anual de energía (kWh)	Coste anual (€)
Caldera de gas natural de condensación	5.127	262,00
Aerotermia (bomba de calor aire-agua)	1.390	306,00

Si te decides por la aerotermia, puedes elegir el modelo que te interesa con nuestro comparador:

Comparar aerotermia

Pero merece la pena considerar las ventajas e inconvenientes de las calderas de gas natural y sus distintos tipos.

Tipos de calderas de gas

Las calderas de gas pueden ser de dos tipos:

• Atmosféricas: son calderas abiertas (puedes ver el quemador), que  captan el oxígeno para la combustión de la misma habitación donde se encuentran instaladas, con lo que hay un intercambio de gases con la estancia. Si el quemador no funciona bien, hay peligro de que se produzca una intoxicación y podría haber fugas. Por eso, se restringió su instalación y ya no se fabrican, pero si tienes todavía instalada una caldera atmosférica no estanca, no es obligatorio que la cambies hasta que deje de funcionar.
• Estancas: son calderas cerradas que toman el aire para la combustión directamente del exterior a través de un tubo y expulsan los gases también hacia fuera. No hay intercambio con la atmósfera de la habitación. Tienen menos riesgos que las atmosféricas. 

Las calderas estancas han evolucionado para mejorar su eficiencia y disminuir las emisiones contaminantes. Una de esas mejoras ha sido introducir la condensación,  que recupera gran parte del calor de los humos evacuados tras la combustión. Al reaprovechar el calor que ya se ha generado, se reduce el consumo de energía  y se enfrían los humos de salida, lo que disminuye las emisiones de contaminantes hasta un 70% respecto a otras tecnologías.

Actualmente, solamente se fabrican calderas de condensación y solo se permite instalar este tipo de calderas para nuevas construcciones. El punto negativo de las calderas de condensación es que su instalación es más compleja que los tipos anteriores.

Pros y contras de las calderas de condensación

Aunque los consumidores están recurriendo cada vez más a sistemas eléctricos  como bombas de calor y otras energías renovables, el gas todavía tiene algunas ventajas en ciertas situaciones, por ejemplo, si ya tienes montado ese sistema de calefacción con sus radiadores y demás, pero te está fallando la caldera. En ese caso, puedes sustituir por una caldera de condensación.

Para que te hagas una idea, el precio medio de las calderas de gas que OCU ha analizado (potencia de 24 kW) es de unos 1.300 euros. Junto con la instalación y adaptación del sistema en caso de ser necesario, el coste total estaría entorno a los 1.900 euros. Si no están instalados, poner radiadores normales costaría unos 769 euros; unos 2.100 euros si son de baja temperatura y 5.850 euros si se opta por el suelo radiante

Estas son las principales ventajas e inconvenientes de las calderas de gas.

Cinco inconvenientes

1. Necesitas tener acceso al suministro de gas natural, gas ciudad…, lo que no es el caso en todas las ubicaciones.
2. El gas no es un combustible renovable por lo que puede estar sujeto a restricciones en el futuro y fluctuaciones de precios.
3. Producen emisiones contaminantes de dióxido de carbono (CO²) y azufre, que contaminan tu entorno y que pueden estar sujetas a penalizaciones en el futuro.
4. Tienes que instalarlas en un lugar donde haya conexiones al gas, la electricidad, un desagüe y se puedan expulsar las emisiones al exterior.
5. Debes pasar revisiones de la caldera cada dos años e inspecciones cada cinco para evitar riesgos en la instalación.

Cinco ventajas

1. Inversión inicial: el precio del aparato y la instalación es menor que el de otros sistemas como la aerotermia o la biomasa. Además, también producen agua caliente sanitaria.
2. Confort: los sistemas de radiadores de agua proporcionan mayor comodidad que los de aire, al no producir corrientes y tener más inercia térmica (tradan más en enfriarse aunque estén pagados).
3. Calientan bien independientemente de la temperatura exterior.
4. Puedes aprovechar una instalación existente de radiadores y tuberías, chimenea de evacuación, etc.
5. Son eficientes, aprovechan el 100% de la energía.

Si la caldera de gas es tu opción, solo te queda elegir el modelo adecuado con la ayuda del comparador, que incluye los resultados en nuestras pruebas, las características, los precios y dónde comprar las mejores calderas de condensación a gas.