Alerta

Esmya 5 mg comprimidos: se suspende su comercialización

26 marzo 2020
retirada esmya

La Agencia Española del Medicamento (AEMPS) suspende la comercialización de este fármaco a raíz de un nuevo caso de fallo hepático grave en una paciente, que ha requerido trasplante de hígado. Si seguías tomando estos comprimidos para los miomas uterinos, deja de hacerlo y habla con tu médico.

Una sospecha que viene de atrás

Esmya 5 mg, en comprimidos, es un medicamento que se usa en el tratamiento de los síntomas de miomas uterinos. No es la primera vez que se relaciona este fármaco con daños hepáticos graves.

En 2018 OCU ya se hizo eco de una alerta publicada por la Agencia Española del Medicamento (AEMPS) sobre Esmya 5 mg. Entonces se dieron unas recomendaciones para restringir su uso y proteger a las pacientes. No se consideraron necesarias otras medidas porque la Agencia Europea del Medicamento (EMA) no pudo establecer una relación causal clara entre el medicamento y los daños hepáticos que se habían notificado.

Ahora, Europa pide suspender su venta

La situación se ha agravado a raíz de un nuevo caso de fallo hepático en una paciente que ha requerido trasplante de hígado. Es ya el quinto caso conocido en todo el mundo

El Comité de Farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento ha comenzado una nueva revisión del balance riesgo/beneficio de este medicamento. Pero mientras tanto, por precaución, la EMA ha pedido que se suspenda la comercialización de este medicamento en toda la UE.

La AEMPS, en un comunicado que acaba de emitir, señala que las pacientes deben de dejar de tomar Esmya y acudir a su médico para buscar otras alternativas. Es importante, además, que a esas mujeres se les realice un análisis de sangre a las 2-4 semanas de terminar el tratamiento, para monitorizar su función hepática. 

¿Tienes síntomas de daño hepático? Vete al médico

Tal y como apunta la AEMPS, las pacientes que hayan estado tomando este medicamento deben estar atentas ante la aparición de cualquiera de estos síntomas:

  • náuseas,
  • vómitos,
  • cansancio,
  • falta de apetito,
  • dolor en la parte superior derecha del abdomen,
  • color oscuro de la orina
  • o coloración amarillenta de la piel y/o la parte blanca de los ojos.

Son indicios de un posible daño hepático. Si tienes esos síntomas, debes acudir sin falta al médico.