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Ibuprofeno 600, 400, 200 mg, ¿qué dosis es mejor?

15 marzo 2024
ibuprofeno 600 o 400 mg

¿Qué dosis de ibuprofeno es conveniente tomar? Las dosis iguales o superiores a 2.400 mg al día aumentan el riesgo de evento cardiovascular, por lo que se recomienda usar la dosis eficaz más baja y durante el menor tiempo posible. ¿Sabías además que el ibuprofeno 600 mg solo se debe adquirir bajo prescripción médica?

Los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son una amplia familia de medicamentos que incluye al menos unos 20 principios activos diferentes. Algunos de ellos son muy conocidos como el ibuprofeno, el naproxeno, el diclofenaco o el etoricoxib.

Antiinflamatorios no esteroideos (AINE): ¿cómo funcionan?

El mecanismo de funcionamiento es similar en todos ellos. Básicamente lo que hacen es impedir la transformación de ácido araquidónico (que es un ácido graso poliinsaturado que se encuentra en la membrana de las células) en prostaglandinas, sustancias fundamentales para el proceso inflamatorio.

Pero las prostaglandinas, además de favorecer la inflamación, están involucradas en otros muchos procesos de nuestro organismo: la agregación de las plaquetas, la vasodilatación, la percepción del dolor, la fiebre, la contracción de la musculatura del útero, la protección de la mucosa gástrica, la protección de la función renal, etc.

Potentes y versátiles

El amplio número de procesos en los que intervienen las prostaglandinas explica las muchas  indicaciones terapéuticas de los AINE, que al impedir la síntesis de prostaglandinas inhiben todos los procesos donde estas sustancias intervienen. Por eso los AINE se usan, por ejemplo como antiagregantes plaquetarios (el famoso Adiro o ácido acetilsalicílico), en el dolor menstrual, en el tratamiento de la fiebre, del dolor y por supuesto de la inflamación.

Bastantes efectos adversos

Pero como las prostaglandinas también tienen un papel protector del estómago, de la función renal y además son vasodilatadores, cuando nos tomamos un medicamento de esta familia también estamos contrarrestando todos estos efectos protectores. Ello explica el amplio número de efectos adversos de todos estos medicamentos:

  • Están contraindicados en pacientes con enfermedad renal grave.
  • Pueden producir hemorragiasúlceras perforaciones gastrointestinales; siendo éste el efecto adverso grave más frecuente y cuyo riesgo aumenta cuanto mayor es la dosis usada.
  • Aumentan la presión arterial entre 3/2 mmHg.
  • Aumentan el riesgo de un evento cardiovascular (infarto agudo de miocardio, ictus, insuficiencia cardíaca y su descompensación). Y este riesgo aumenta cuánto mayor es la dosis usada y la duración del tratamiento.

Ibuprofeno: ¿qué dosis es la más adecuada?

El ibuprofeno es uno de los antiinflamatorios no esteroideos más comúnmente usado. Se puede encontrar en distintas dosis, indicadas para diferentes usos: 600 mg, 400 mg, 200 mg...

Recientemente ha sido noticia la Agencia Francesa del Medicamento, al prohibir la publicidad del Ibuprofeno 400 mg tras detectar en el país un incremento de efectos indeseados. 

Lo cierto es qyue teniendo en cuenta sus múltiples efectos adversos, las agencias regulatorias de medicamentos insisten en que con el ibuprofeno y demás medicamentos de esta familia de antiinflamatorios no esteroideos (AINE) se debe usar siempre la dosis eficaz más baja y durante el menor tiempo posible.

La dosis de 400 mg, mejor que la de 600 mg

En el año 2015 la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), máxima autoridad reguladora en cuanto a la eficacia y seguridad de medicamentos en España, publicaba una nota dirigida a los profesionales sanitarios dónde informaba sobre este tema y centrándose concretamente en el ibuprofeno. En esta nota se advertía que las dosis altas de ibuprofeno iguales o superiores a 2.400 mg al día (esta dosis equivaldría a 4 o más comprimidos de ibuprofeno 600 mg) están contraindicadas en pacientes con patología cardiovascular grave como:

  • Insuficiencia cardiaca (nivel II-IV de New York Heart Association-NYHA).
  • Cardiopatía isquémica establecida.
  • Enfermedad arterial periférica.
  • Enfermedad cerebrovascular.

Sin embargo, con el uso ocasional de ibuprofeno o si se toman al día 1.200 mg o menos (dosis que equivale a 3 comprimidos al día de ibuprofeno 400 mg), no existe riesgo de infarto o trombosis arterial.

Ibuprofeno 600 mg, con receta

El ibuprofeno 400 mg es la presentación apta para el autocuidado de los pacientes y como tal no requiere de prescripción médica. Por el contrario, el ibuprofeno 600 mg solo se puede adquirir bajo prescripción médica. De hecho, un comprimido de ibuprofeno de 400 mg 3 veces al día es la dosis recomendada para el tratamiento de dolores leves-moderados, mientras que el ibuprofeno 600 mg 3-4 veces al día es la dosis que se suele recomendar en procesos inflamatorios o dolores musculoesqueléticos graves como los que padecen los pacientes reumáticos.

Esta diferencia no es baladí ya que la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios (RD 1/2015, de 24 de julio) en su artículo 19 recoge los criterios bajo los cuáles un medicamento se clasificará como sujeto a prescripción médica:

  1. Si puede presentar un peligro, directa o indirectamente, incluso en condiciones normales de uso, si se utilizan sin control médico.
  2. Si se utiliza frecuentemente, y de forma muy considerable, en condiciones anormales de utilización, y ello pueda suponer, directa o indirectamente, un peligro para la salud.
  3. Si contiene sustancias o preparados a base de dichas sustancias, cuya actividad y/o reacciones adversas sea necesario estudiar más detalladamente.
  4. Si se administra por vía parenteral.

Básicamente, estos 4 criterios hacen referencia al perfil de seguridad del medicamento en cuestión. En definitiva, cuando el perfil de seguridad es tal que puede suponer un peligro para la salud de las personas se clasifica como medicamento sujeto a prescripción médica.

Desde el punto de vista de la eficacia y la seguridad de los medicamentos tiene, por tanto, sentido que el ibuprofeno 600 mg sea un medicamento que requiera de receta médica y que el ibuprofeno de 400 mg no la necesite, ya que el ibuprofeno 400 mg permite alcanzar dosis terapéuticas para aliviar dolores moderados y usada correctamente es más segura que la de 600 mg, con la que sería más fácil alcanzar la dosis de 2.400 mg/día sobre la que alertan los expertos.

Es más, en general y sobre todo a dosis elevadas, todos los AINE tienen un perfil de riesgo considerable que en multitud de situaciones (insuficiencia renal, patología cardiovascular, enfermedad gastrointestinal, hipertensión arterial, asma, pacientes anticoagulados o polimedicados, etc.) requieren, en el mejor de los casos, ser usados con precaución.

Ibuprofeno pediátrico: atención a la dosis y presentación

El ibuprofeno es un medicamento de uso habitual en pediatría para calmar el dolor y la fiebre de los niños. Pero hay que tener presente que no se debe usar ni en niños menores de 3 meses de edad, ni en niños de menos de 5 kg de peso. Y que, en menores de 2 años de edad, solo se puede usar bajo indicación del médico.

Otro aspecto importante es que, en el caso de los niños, la dosis a usar depende de la edad y del peso

En líneas generales, la dosis para niños es de 20-30 mg/kg en 24 horas, cantidad debe repartirse en 3 o 4 tomas a lo largo del día, a intervalos de tiempo nunca inferiores a 4 horas.

A modo de ejemplo si un niño pesa 12 kg la dosis total diaria que podemos dar oscilará entre 240 o 360 mg como máximo. Esta dosis total habrá que dividirla en 3 o 4 tomas: si se administra en tres tomas eso significa que en cada toma deberemos dar entre 80 o 120 mg, si es en cuatro tomas, en cada una deberemos dar entre 60 o 90 mg.

Para los más pequeños, ibuprofeno líquido

Pero como para administrar ibuprofeno a los niños más pequeños hay que recurrir al ibuprofeno líquido en suspensión oral, esto quiere decir que tenemos que transformar la cantidad en miligramos de ibuprofeno a mililitros y para ello hay que tener en cuenta que las suspensiones líquidas orales de ibuprofeno se comercializan en dos concentraciones diferentes, donde una de ellas contiene el doble de cantidad de ibuprofeno que la otra:

  • Ibuprofeno suspensión oral 20 mg/ml
  • Ibuprofeno suspensión oral 40 mg/ml

Siguiendo con nuestro ejemplo de un niño que pesa 12 kilos.

  • Si diéramos ibuprofeno de la suspensión de 20mg/ml en tres tomas eso significa que tendríamos que darle entre 4 o 6 ml en cada toma.
  • Si diéramos ibuprofeno de la suspensión de 20mg/ml en cuatro tomas eso significa que tendríamos que darle entre 3 o 4,5 ml en cada toma.
  • Si diéramos ibuprofeno de la suspensión de 40mg/ml en tres tomas eso significa que tendríamos que darle entre 2 o 3 ml en cada toma.
  • Si diéramos ibuprofeno de la suspensión de 40mg/ml en cuatro tomas eso significa que tendríamos que darle entre 1,5 o 2,25 ml en cada toma.

El ibuprofeno líquido en suspensión oral se comercializa bajo diferentes marcas: Dalsy, Ibudol, Ibufen, Nurofen, etc. Cada una de estas marcas comercializa las dos concentraciones mencionadas anteriormente así, por ejemplo, tenemos Dalsy 20mg/ml suspensión oral y Dalsy 40 mg/ml suspensión oral.

Estas preparaciones de una misma marca, a concentraciones diferentes, se suelen diferenciar entre sí por el color y el aroma. Así, por ejemplo, el Dalsy de 20 mg/ml es de color y aroma naranja, mientras que el de 40 mg/ml es de color y aroma a fresa.

Es importante que los padres tengan presente que cuando se cambia a una suspensión de diferente concentración hay que cambiar también el volumen de la dosis que vayamos a administrar. Si estamos acostumbrados a dar la suspensión de 20 mg/ml y cambiamos a la de 40 mg/ml, debemos ser conscientes que deberemos administrar la mitad de volumen al que estamos habituados. Para no confundirnos lo mejor es fijarse en lo que marca el prospecto de estos medicamentos ya que en ellos se indica directamente el número de mililitros que hay que dar en cada toma en función del peso del niño.

Ibuprofeno 200 mg, para niños más mayorcitos

Para niños de más edad, a partir de 7 u 8 años y con 20 kg o más de peso, existe ya la posibilidad de usar preparaciones orales de ibuprofeno de 200 mg en sobres o granulados efervescente. Y, en adolescentes mayores de 12 años, en el caso de que sean capaces de tragar comprimidos enteros, se pueden usar también preparaciones de ibuprofeno 200 mg en comprimidos, respetando siempre la posología y dosis máxima diaria que indique el prospecto.

En concreto la dosis recomendada en estos casos suele ser:

  • Niños de 20 a 29 Kg (7-9 años): 200 mg tres veces al día. No sobrepasar la dosis máxima de 600 mg al día.
  • Niños de 30 a 39 Kg (10-12 años): 200 mg tres o cuatro veces al día. No sobrepasar la dosis máxima de 800 mg al día.
  • Adolescentes de 40 o más kilos de peso (mayores de 12 años): 200 o 400 mg tres veces al día. No sobrepasar la dosis máxima de 1.200 mg al día.
Con el ibuprofeno, al igual que con todos los medicamentos, es importante leer el propecto y conocer de antemano los posibles efectos adversos que pueden aparecer, especialmente, si es la primera vez que lo vamos a usar en el niño. El ibuprofeno, entre los diferentes posibles efectos adversos, puede producir reacciones alérgicas que se pueden manifestar en forma de erupciones cutáneas, hinchazón de la cara, pitos en el pecho y dificultad respiratoria. Este tipo de reacción adversa es poco frecuente pero en caso de que se dé es necesario interrumpir el tratamiento y acudir al médico de inmediato.

El comprimido de 600 mg financiado es 0,02 céntimos más barato

Lo que  no tiene sentido es que mientras la AEMPS advierte sobre los peligros de las dosis elevadas de estos medicamentos, el Ministerio de Sanidad fije el precio del ibuprofeno 600 mg más barato que el de ibuprofeno 400 mg. Actualmente una caja de ibuprofeno 600 mg (40 comprimidos) financiado cuesta 1,97 € y una caja de ibuprofeno 400 mg (30 comprimidos) financiado cuesta 2,06 €, es decir, el comprimido de ibuprofeno 600 mg sale a 0,05 céntimos y el de 400 mg sale a 0,07 céntimos. Desde un punto de vista puramente monetario traería más a cuenta prescribir las dosis elevadas de ibuprofeno cuando desde un punto de vista de seguridad del medicamento no es lo adecuado.

Otra situación incoherente es que, independientemente de los criterios de seguridad mencionados anteriormente (y que permiten clasificar a los medicamentos en si requieren o no receta médica) el artículo 92 de la Ley de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, establece que no se incluirán en la prestación farmacéutica medicamentos no sujetos a prescripción médica.

Esto conduce a la siguiente absurda situación: si una persona adulta quisiera ir directamente a la farmacia a comprarse un antiinflamatorio vía oral para tratar el dolor de una leve contractura muscular sin tener que acudir al médico se encontraría con que en la farmacia el antiinflamatorio que le pueden dispensar es ibuprofeno 400 mg, pero como el consumidor acude sin receta médica no podrían venderle ninguna de las marcas de ibuprofeno 400 mg financiadas por el Ministerio. Tendría, por ello, que adquirir cualquier otra marca no financiada y, por tanto, de precio libre fijado por el laboratorio fabricante, como por ejemplo: Ibudol 400 mg (20 comprimidos) que cuesta 3,87 €; Nurofen 400 mg (12 comprimidos), que cuesta 5,84 €; Espididol 400 mg (12 comprimidos) que cuesta 4,78 € o Dalsy 400 mg (30 comprimidos) que cuesta 4,96 €.

Es decir, que un mismo medicamento clasificado como apto para el autocuidado de los consumidores y que como tal no requiere de receta médica para su dispensación, te puede costar hasta 7 veces más si no llevas la receta médica pertinente: un auténtico sinsentido.

Pedimos que se priorice la seguridad del paciente

De acuerdo al artículo 19 de la Ley del Medicamento hay medicamentos que requieren receta médica y otros que no. Y según el artículo 92, hay medicamentos financiados y otros que no. En resumen: dentro de los medicamentos que requieren receta los hay financiados y no financiados,  pero entre los medicamentos que no requieren receta no habrá ninguno financiado.

Desde OCU creemos que, ya que el ibuprofeno a dosis elevadas aumenta el riesgo de eventos adversos de tipo aterotrombótico se debería, al menos, igualar el precio de financiación del ibuprofeno 400 mg al del ibuprofeno 600 mg. Además, si el ibuprofeno 400 mg es el antiinflamatorio de elección para el autocuidado de los consumidores, la administración debería habilitar el mecanismo a través del cual estos medicamentos se puedan dispensar sin que el consumidor tenga que pagar el doble o hasta siete veces más por exactamente el mismo principio activo, la misma dosis y la misma presentación.

Todo ello permitiría conciliar de una forma más lógica la seguridad del paciente, que siempre debe ser lo primero, con un menor coste para el usuario.