colchones

Elegir un colchón

Encuentra el colchón que mejor se adapte a tus necesidades

Si quieres comprar un colchón y no sabes cuál elegir y cuáles son las mejores características para tus necesidades te ayudamos a elegir. Antes de todo hay que evaluar el tipo de colchón: colchón de muelles, colchón de espuma de poliuretano, colchón con capa de espuma viscoelástica, colchón de látex. Luego habrá que analizar la firmeza adecuada y el mejor material del colchón.

Guía de compra

Tipos de colchones

Pasamos revista a los tipos de colchones más comunes y a sus características. Además, te indicamos el precio medio orientativo de cada tipo (para una medida de colchón de 90 x 190 cm). 

fijarse al elegir colchón

Colchones de muelles

Los colchones de muelles pueden ser de diferentes clases, muelles independientes, continuos o embolsados

  • Los colchones de muelles independientes (bonell o bicónicos) tienen un núcleo formado por múltiples muelles metálicos colocados en vertical, que se estrechan en su tramo central y están enlazados unos a otros por hilos metálicos.
  • En los colchones de muelle continuo, el entramado está hecho a partir de un único hilo de acero. En ambos casos el núcleo va cubierto por varias capas de espuma o algodón.

    Los dos colchones ofrecen un soporte suficiente y una buena ventilación, por lo que pueden resultar algo frescos. Hay colchones con cara de verano y cara de invierno, más cálida.

    El precio de estos colchones varía. Los colchones de muelles independientes son bastante económicos, para una medida de 90 x 190 cm, cuesta, de media 200 euros, y los colchones de muelles continuos, unos 350 euros.

  • Los colchones de muelles embolsados están formados por cientos de muelles independientes, metidos en saquitos de tela individuales y unidos por una sujeción muy fina.
    • En principio, se adaptan bien a la forma del cuerpo y ofrecen una buena ventilación, aunque sus características varían mucho dependiendo de las capas que recubran el núcleo y de la forma concreta de sus muelles. Mantienen una buena independencia de movimientos para los dos miembros de la pareja en una cama de matrimonio. 
    • A menudo llevan un recubrimiento muy generoso de diferentes materiales que los hace estar a medio camino entre los colchones de muelles y los de espuma viscoelástica.
    • El precio de los colchones de muelles embolsados Su precio es mayor que el de otros colchones de muelles: un colchón individual de 90 x 190 cm costará unos 600 euros.
Colchón de muelles
Colchón de muelles

Colchones de espuma de poliuretano

  • Estos colchones se parecen a un "bizcocho" de capas de poliéster y poliuretano lleno de miles de pequeñas celdillas o burbujas de aire, y cubierto por una funda.
  • Dependiendo del número de celdillas por m3, de su tamaño y de los agentes cohesionantes que lleve la espuma, el colchón será más o menos firme. En general, a mayor ligereza, más blandura y peor envejecimiento.
  • Las densidades inferiores a 35kg/m3 sólo convienen a las camas para huéspedes ocasionales o niños pequeños.
  • En general, son fáciles de manejar y buenos aislantes del calor.
  • Los precios de estos colchones varían en función de la densidad. Los de gomaespuma, los más corrientes cuestan unos 70 euros. Los colchones de espuma de alta densidad rondan los 200 euros.

Colchón de espuma de poliuretano

Colchón de espuma de poliuretano

Colchones con capa de espuma viscoelástica

  • Están recubiertos por una o variass capas de una espuma especial que se amolda al cuerpo bajo los efectos del calor y la presión, ofreciendo una óptima distribución del peso corporal.
  • La deformación del material perdura durante un tiempo cuando se cambia de postura, lo que puede resultar incómodo.
  • Estos colchones viscoelásticos interesan, sobre todo, a quienes deban pasar mucho tiempo en la cama.
  • Son más caros: un colchón de 90 x 190 cm puede costar unos 800 euros aunque es posible encontrar modelos más asequibles.
  • Colchón de material viscoelástico
    Colchón de material viscoelástico

    Colchones de látex 

    • Estos colchones están hechos de espuma de látex natural (proveniente del árbol del caucho), látex sintético (proveniente del petróleo) y materiales auxiliares usados en distintas proporciones. Hay colchones que combinan látex natural y sintético.
    • El núcleo lleva perforaciones para facilitar la aireación, reducir el peso y crear zonas con distinta resistencia.
    • Los colchones de látex ofrecen un sostén bastante firme, pero al mismo tiempo son muy flexibles y se adaptan bien a los contornos del cuerpo, distribuyendo la presión de manera uniforme.
    • Son buenos aislantes del calor, y gracias a las ventilaciones mantienen igualmente un ambiente agradable en la zona de contacto. 
    • Estos colchones son una buena opción para quienes se mueven mucho por la noche, pues el látex absorbe eficazmente los movimientos del cuerpo. También para parejas si uno se mueve mucho.
    • Para las personas con alergias respiratorias o asma, los colchones de látex o espuma son una buena opción para evitar el riesgo de colonias de ácaros en el interior de los muelles. Sin embargo, están prohibidos para los alérgicos al látex.
    • Son bastante pesados, lo que unido a su gran flexibilidad, los hace incómodos de manejar.
    • Estos colchones pueden llevar distintos tapizados: algodón, lana, seda, sintético, etc.
    • Los colchones de látex suelen ser bastante caros. Pero el precio varía según se trate de látex sintético (unos 450 euros) o natural (unos 600 euros).
    Colchón de látex
    Colchón de látex

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    Colchones especiales

    • Los colchones ortopédicos son adecuados para quienes deben estar mucho tiempo en cama. No son adecuados para una persona sana, pues es incómodo moverse en uno de ellos. Son bastante caros, suelen usarse por recomendación médica.
    • Los colchones de agua son pesados, necesitan una cuidadosa conservación y estar calefactados para mantenerse a una temperatura adecuada. Además, una cama de agua puede resultar incómoda, sobre todo para quien se mueve mucho por la noche o para quien duerme boca abajo. Su nota más positiva es que el cuerpo se adapta bien al colchón.
    • El futón, colchón japonés hecho con capas de algodón,  es adecuado para quien busca una base muy dura. Su espesor es muy reducido,  y disminuye con el uso, Debe cambiarse con frecuencia.
    • Los colchones de lana clásicos tiene muchas desventajas: se apelmazan, son difíciles de manejar y de mantener bien y resultan impensables para quien padece alergias respiratorias.

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    Base de colchón

    Somier de láminas: aptos para cualquier tipo de colchón. Se trata de una base bastante común y no demasiado cara. Además, permite una adecuada ventilación del colchón.

    Tabla tapizada: el más adecuado para colchones de muelles y de espuma. Muchas de estas bases sirven a la vez de base tanto para el colchón, como para un arcón. Los fabricantes no recomiendan esta base para colchones de látex.

    Somier de muelles: es una base algo especial, permite que el colchón sea más simple y por eso se usa a veces en hoteles, ofrecen una ventilación excelente.

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    Firmeza del colchón

    Un buen colchón debe repartir el peso del cuerpo de la manera adecuada. Debe ser lo suficientemente firme para sostener bien el cuerpo, pero no tanto que resulte incómodo. En los últimos años se ha extendido la idea de que un colchón duro es siempre lo mejor para la espalda. No es así: en último término, la dureza, o mejor, la firmeza del colchón es una cuestión de preferencia personal, y de peso.

    • Un buen colchón debe respetar la curvatura natural de la columna vertebral, boca arriba y alineada mientras duermas de lado
    Un buen colchón debe respetar la curvatura de la columna
    Colchón bueno

    Si el colchón es demasiado duro, no se adapta al cuerpo. Esto por un lado permite una mejor aireación, pero por otra hace que el peso del cuerpo no se distribuya adecuadamente por toda la superficie del colchón.

    • Colchón rígido, la espalda no se adapta

    Un colchón rígido, no respeta la espalda
    Colchón duro

    En un colchón demasiado blando, el cuerpo tiende a hundirse. Esto presenta distintos problemas: la sensación de calor aumenta, porque no circula el aire, y por otro lado la columna vertebral y la espalda no están bien sujetas, ni al dormir boca arriba, ni de lado.

    • Colchón blando, la curvatura de la columna se ve afectada.

    El colchón blando, puede provocar que la columna se vea afecatda
    Colchón blando

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    5 preguntas antes de elegir colchón

    ¿Cómo duermes?

    • Si duermes boca arriba, en posición supina, sobre la espalda, debes escoger colchones duros.
    • Si duermes de lado, te puede convenir un colchón de menor firmeza, que permita al hombro hundirse levemente, hasta encontrar una posición cómoda.

    ¿Cuánto pesas?

    • Si pesas bastante, necesitarás colchones firmes, que ofrezcan buena sujeción. En un colchón blando te hundirías en exceso.
    • Las personas más ligeras necesitan también colchones de mayor flexibilidad, que se adapten a su contorno para repartir mejor el peso.

    ¿Te mueves mucho?

    • Si te mueves mucho mientras duermes te conviene un colchón algo más duro que te permita girarte sin esfuerzo. En un colchón blando te hundirías demasiado, y te costaría girar, lo que resulta incómodo. 

    ¿Pasas calor?

    • Si pasas calor, sudas con facilidad o vives en un lugar cálido, los colchones de muelles pueden convenirte más, pues se ventilan mejor y son más frescos.
    • Si eres friolero o vives en un lugar frío,  los modelos de espuma, de látex o de material viscoelástico guardan más el calor.

    Otras cuestiones

    • Si deseas una base articulada, necesitas un colchón flexible (de espuma, de látex o de muelles embolsados).
    • Si eres alérgico al polvo o asmático, se recomienda usar un colchón de espuma o de látex con una funda lavable (salvo, claro está, que seas alérgico al látex).
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    Comprar un colchón

    Tómate algo de tiempo para probar el colchón en la tienda antes de comprarlo:

    • No basta con sentarse y palparlo, túmbate, prueba distintas posturas... busca el colchón que mejor se adapte a tu gusto, a tus características y a tus necesidades.
    • Túmbate de espaldas y pasa una mano entre la zona lumbar y el colchón: si hay demasiada holgura el colchón puede ser demasiado rígido para tus características. Si la mano no pasa, el colchón es demasiado blando y el cuerpo se hunde en exceso.
    • Si duermen juntos en una cama doble dos personas con pesos y costumbres muy distintas, se puede optar por dos colchones unidos, cada uno adaptado a las condiciones del usuario. No obstante, un colchón de látex o uno de muelles embolsados mantendrán igualmente la independencia de movimientos.

    Colchones enrollados

    Cada vez son más frecuentes los colchones que se venden enrollados y en general, envasados al vacío (“bed in box” por su nombre en inglés) en vez de abiertos y listos para usar. Su principal ventaja es que caben en el coche, lo que facilita su transporte.

    Al llegar a casa, hay que retirar el plástico que lo envuelve con cuidado de no cortar el tejido del colchón y dejarlo tomar forma en posición horizontal sobre una superficie rígida, como puede ser el somier, sin apoyar nada encima durante el tiempo que recomiende el fabricante, normalmente 24h.

    Hay que tener en cuenta que estos colchones no se pueden almacenar indefinidamente enrollados, porque perderían prestaciones. Así que si lo vas a comprar para una segunda residencia o para usarlo dentro de un tiempo, procura desembalarlo antes de 30 días desde el momento de la compra.

    Hasta 100 días de prueba

    Aunque la mayoría de los colchones no se pueden devolver una vez que se ha retirado la funda protectora por motivos de higiene, algunas marcas han ampliado el plazo de devolución hasta 100 días, algo a tener en cuenta a la hora de escoger un colchón, porque tener la posibilidad de probarlo en casa y poder devolverlo supone un extra de tranquilidad.

    Infórmate bien antes de la compra del proceso de devolución en caso de que no estés satisfecho: quién paga el transporte, si hay exclusiones para la devolución, qué plazos tienes para tomar la decisión y cuál sería el procedimiento para ponerlo en marcha. Cuanto más preguntes antes de la compra, menos disgustos te llevarás después.

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    Preguntas frecuentes

    Resolvemos las dudas más frecuentes de los consumidores sobre colchones.

    ¿Con qué se quita la sangre del colchón?

    Manchas de sangre: lo más rápido es aplicar un poco de agua con unas gotas de amoniaco y secar con un paño; si no tenemos amoniaco, también se puede añadir al agua un chorro de agua oxigenada en lugar del amoniaco y dejar secar; también encontraremos quitamanchas específicos y, si no, usaremos detergente enzimático frotando suavemente con un paño limpio.

    ¿Para qué sirve un colchón antiescaras?

    Es un colchón geriátrico diseñado para personas con movilidad reducida que deben pasar muchas horas en la cama y que se puede utilizar en una cama articulada y cuya función consiste en evitar al máximo los puntos de concentración de presiones, para ello se utiliza la espuma viscoelástica que se adapta y cede conformando todo el contorno del cuerpo y distribuyendo la presión uniformemente; si bien la espuma viscoelástica comenzó para estos usos sanitarios ahora son muchos los colchones que la incluyen; otra variedad son los colchones sanitarios para convalecencias, en cuya caso las espuma empleada no está pensada especialmente para evitar la aparición de escaras.

    ¿Con qué se desinfecta un colchón?

    Puede necesitar desinfectar un colchón debido a una enfermedad contagiosa, en ese caso debe emplear un producto desinfectante con un componente biocida, la pandemia de coronavirus han puesto de moda este tipo de productos y debe buscar una adecuado para textiles; lea detenidamente la etiqueta donde consta para que tipo de microorganismos ha sido certificado y el modo de empleo; respete escrupulosamente los tiempos de acción y la dosis de aplicación. 

    ¿Con qué se puede inflar un colchón hinchable?

    Un colchón necesita mucho aire, no piense que puede inflarlo soplando, tendrá que usar un fuelle de pie que resulta bastante práctico de usar o una bomba de mano, algunos aspiradores disponen de una posición reverso para expulsar aire y lo más cómodo es un soplador eléctrico; a la hora de desinflarlo recuerde que el aire no se vacía por sí solo como el agua, la mejor manera de sacar todo el aire es enrollarlo y luego ya doblarlo a nuestro gusto para guardarlo.

    ¿Cuánto tiempo dura un colchón?

    Los fabricantes recomiendan cambiar el colchón después de unos 8 años de uso. Es cierto que con el paso del tiempo los colchones van perdiendo consistencia y grosor y ya no ofrecen las condiciones óptimas del descanso. Nuestro consejo es no esperar más de 10 años de uso para cambiarlos.

    ¿Para qué sirve el pillow en los colchones?

    Se denomina "pillow-top", que quiere decir algo así como un cobertor tipo almohada que cubre toda la superficie del colchón; puede dar una sensación más acogedora en colchones de muelles sencillos tipo Bonnell, pero en realidad no aporta nada al soporte de la columna vertebral que siempre es tarea del núcleo del colchón; tiene la desventaja de que no se puede voltear el colchón.

    ¿Cómo quitar las manchas de pipi de un colchón?

    Manchas de orina: si es reciente lavar con agua jabonosa y unas gotas de amoniaco, o usar dos partes de vinagre de limpieza, dos partes de bicarbonato y una parte de detergente líquido; si están secas, aplicar un quitamanchas para proteínas o específico de orina y aclarar; una mezcla muy práctica si tenemos una mancha extensa consiste en preparar una pasta con dos partes de bicarbonato, una parte de agua y una parte de agua oxigenada que podemos aplicar con un cepillo sobre toda la zona y dejar secar; lo ideal es hacerlo cuando la luz entre por la ventana y acercar el colchón para potenciar el efecto limpiador, al cabo de unas horas cepillar los restos secos.

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