Consejos

¿Qué es lo mejor para hidratar la piel?

Ahora que arrecia el frío es también muy importante proteger la piel de nuestro cuerpo. ¿Qué es mejor para mantener una piel sana frente a las inclemencias, una crema, una loción o leche o un aceite? Depende.

19 enero 2023
crema o loción

Objetivo: piel bien hidratada todo el año

Mantener la piel hidratada es especialmente importante en los meses más fríos y los climas más secos, o si existe alguna enfermedad que afecte a la función de barrera de la piel (psoriasis, dermatitis atópica). En el mercado hay una amplia oferta de productos para hidratar y proteger la piel del cuerpo... ¿Es mejor una loción o una crema? ¿Resulta preferible el aceite? Te ayudamos a dar con lo que necesita tu piel.

Piel naturalmente protegida

La piel humana se protege a sí misma. Para ello cuenta con una barrera natural compleja:

  • Con el estrato córneo o capa córnea, unas capas de células que contienen ceramidas, ácidos grasos y colesterol, y altas concentraciones de moléculas como aminoácidos, ácido láctico, urea y electrolitos. Estas células son higroscópicas, es decir, absorben el agua del ambiente.
  • Con glándulas sebáceas. El sebo constituye la cubierta lipídica de la piel y está compuesto de mayor a menor cantidad por triglicéridos, ácidos grasos, ceras, escualeno, y colesterol.

Aun así, muchas personas tienen la piel muy seca. Y en mayor o menor medida, casi todos sufrimos esa sequedad en determinados momentos: son muchas las causas que pueden estar detrás de la piel seca, desde el lavado frecuente de manos, a la exposición a productos químicos agresivos, problemas médicos (como la dermatitis atópica, la ictiosis y la psoriasis), las bajas temperaturas o la baja humedad ambiental. Para mejorar el aspecto y la función de la piel, es preciso asegurar la hidratación cutánea, y para ello es habitual recurrir a los productos de cuidado de la piel, que hidratan y restablecen esta barrera.

Emolientes: ayuda "extra" necesaria

Cuando la capa superior de la piel se agrieta, se deteriora la capa córnea. Entonces el ingrediente emoliente (de un aceite, crema o loción) rellena esos huecos con sustancias grasas, para conseguir un efecto suavizante y calmante.

Muchos productos cosméticos se formulan tratando de simular las capas de barrera y sebo de la piel para proporcionar esa protección tan necesaria. Por eso, la mayoría de los productos de cuidado de la piel contienen agua y aceite en diversas proporciones, así como otros componentes, como los emulsionantes, que ayudan a mejorar la penetración de los lípidos en la piel y, claro, estabilizantes, conservantes, antoxidantes, perfumes,etc... es común ver que, a menudo, en los cosméticos se incluyen más aditivos que sustancias activas para el cuidado de la piel.

Hay distintos tipos de productos cosméticos para la hidratación corporal, lociones, cremas y aceites. ¿Qué distingue a cada uno? ¿Cuál es mejor? 

Lociones corporales

La loción corporal contiene ingredientes emolientes. Combina una fase acuosa con aceites o grasas en diferentes proporciones. 

  • Los aceites o grasas mas frecuentes que vemos en lociones o productos de cuidado de la piel son:
    • aceites vegetales, mantecas de cacao, karité, etc.,
    • grasas minerales como parafinas o vaselina,
    • grasas de origen animal como cera de abeja,
    • otros ingredientes sintéticos como las siliconas.
  • La loción tiene una fórmula ligera, que hace que sea fácil de extender y de usar, y además, penetra en la piel más fácil que el aceite.

Las mejores lociones corporales

Aceites para cara o cuerpo

Los aceites (vegetales o minerales) son ingredientes habituales de cremas y lociones, pero también hay productos solo a a base de aceites.

  • Los aceites funcionan como oclusivos, creando una barrera física en la superficie de la piel para evitar la pérdida de agua transepidérmica. 
  • El aceite puede actuar como emoliente sobre la capa exterior de la piel, con lo que desde el punto de vista fisiológico puede ser también una buena opción para su cuidado.
  • El "pero" viene sobre todo del uso: por su textura, el aceite corporal no se extiende con tanta facilidad como una crema o loción, con lo que puede resultar más dificil penetrar en la capa córnea. Además, deja sobre la piel una capa oleosa que no gusta a todo el mundo o que hace que no te puedas vestir rápidamente.
  • Para una mayor eficacia, conviene aplicarlo sobre la piel húmeda, creando una barrera protectora y aceitosa que puede ayudar a mantener el agua. 

Cremas y geles

  • Las cremas son mezclas de sustancias grasas o aceites y agua. Por su composición son similares a las lociones (aunque suelen tener más ingredientes grasos), si bien varían en su textura más untuosa y espesa.
  • El gel es otro tipo de textura, normalmente indicado para pieles mixtas o grasas, ya que tienen una proporción de agua aún más alta que las cremas y muy baja de aceites.

Las mejores cremas de manos

¿Cuál debo utilizar?

La elección del producto depende de tu piel, el grado de sequedad y los problemas cutáneos que sufras:

  • La loción es la mejor opción si se trata de una sequedad estacional en una piel normal.
  • Si la piel no está excesivamente seca y lo que quieres es retener la humedad y ayudar a tu piel a mantenerse hidratada, el aceite corporal puede ser una buena opción.
  • Si necesitas una mayor hidratación y tienes la piel seca habitualmente, las cremas suelen tener un mayor contenido en aceite que las lociones y te pueden ir mejor.

Cuatro consejos para mejorar tu piel seca

  1. Lávala con suavidad. Si tienes la piel seca, por supuesto debes mantenerla limpia, pero no debes lavarla más de lo necesario: evita hacerlo con mucha frecuencia, ni durante mucho tiempo. No uses agua demasiado caliente, y seca con toalla, con suavidad y sin frotar. 
  2. Usa un cosmético emoliente. Una piel seca está falta de lípidos, necesita fijar la humedad: usa una hidratante corporal, ya sea crema, loción o aceite.
  3. Protégela. Recurre a protector solar en las zonas expuestas, y ten en cuenta que frío y viento empeoran la piel seca.
  4. Cuídate. Bebe lo suficiente, sigue una alimentación equilibrada y saludable, duerme... el cansancio, el estrés y la "mala vida" pasan factura a tu piel.