Así analizamos

Cremas hidratantes: así hacemos el análisis


 

Sabemos que este estudio despierta mucha curiosidad, y por ello queremos contarte con todo detalle cómo lo hemos hecho. El principal objetivo del estudio es medir y comparar la eficacia en hidratación de las cremas faciales, para lo cual hemos seleccionado 16 cremas hidratantes de día para pieles normales y mixtas. ¿Quieres saber cuáles son las mejores?

CONSULTA EL COMPARADOR DE CREMAS HIDRATANTES

¿Qué productos hemos analizado?

En la selección de los productos, hemos dado prioridad a la textura crema o crema-gel (pero no geles ni sérums), en envases tanto en tarro como en tubo.

  • Hemos incluido productos de marcas líderes de venta en supermercados y perfumería, como Nivea y Garnier.
  • Tenemos también productos de dos conocidas marcas de distribuidor (Mercadona y Lidl).
  • La parafarmacia queda reflejada con marcas como Avène y La Roche-Posay, entre otras.
  • De alta perfumería incluimos productos de Lancôme y Biotherm, y también algunas de tiendas específicas como Sephora, Yves Rocher o Rituals.
  • Por último, para dar un espacio a la cosmética natural de venta en herbolarios, hemos incluido la marca Weleda.

Realizamos este análisis junto a otras asociaciones de consumidores europeas, con las que compartimos un alto porcentaje de marcas en el mercado y costeamos de forma conjunta los gastos del laboratorio especializado.

¿Qué aspectos valoramos? 

Para valorarlas se han tenido en cuenta distintos criterios: hidratación, prueba de usuarias, composición, etiquetado y diseño del envase desde el punto de vista medioambiental. La eficacia en la hidratación es el criterio más importante y el que más pesa en la calificación global del producto, seguido de la satisfacción de las usuarias en la prueba de uso.

En este vídeo explicamos cómo se ha hecho el análisis:

Eficacia en hidratación 

Las mediciones se realizan en un laboratorio especializado en cosméticos:

  • La prueba se realiza mediante corneometría sobre la piel del antebrazo de 30 usuarias voluntarias, y en dos momentos: día 0 y 2 semanas después de usarlas día y noche. El corneómetro es un aparato que sirve para medir el grado de hidratación de la capa más externa de la piel.
  • Los resultados de la prueba de hidratación se comparan con los de una crema estándar buena no comercial que el laboratorio utiliza para control. Para medir las diferencias, se estudiaron también los cambios en una zona de piel sin tratar,
  • Los resultados de la corneometría han sido tratados con fórmulas matemáticas para poder ofrecer valores estadísticamente significativos y no valores extremos.

Los productos se han clasificado en función de las diferencias observadas. Todas las cremas mejoran la hidratación de la piel respecto al día 0, es decir, antes de comenzar la prueba.

En la comparación con el producto estándar bueno de control, la cremas que hidratan tanto como este producto obtienen una valoración de cuatro estrellas (en una escala de cinco). En total, 14 de las 16 cremas obtienen esa calificación. Hay dos cremas que hidratan algo menos que el estándar, por eso han recibido una puntuación de tres estrellas. 

En conclusión: OCU considera que las 16 cremas analizadas sí son hidratantes.

Prueba de uso

Cada producto fue probado por 30 usuarias, que recibieron las muestras en idénticos tarros blancos. Así no podían saber la marca del producto que estaban probando. Un cuestionario individual nos permitió conocer las opiniones de las usuarias sobre las propiedades cosméticas de cada crema: textura, aplicación y sensación sobre la piel, absorción, brillos, si la piel queda con tacto graso o pegajosa, intensidad del perfume… También incluimos preguntas para conocer cómo valoran las usuarias el efecto hidratante o “eficacia percibida”.

Etiquetado

Primero comprobamos si el etiquetado cumple la legislación vigente. Además, valoramos si el producto contiene alegaciones innecesarias o vacías de contenido. Algunos productos alegan “no comedogénico”, “hipoalergénico”, “dermatológicamente testado” o “con control dermatológico”, términos que no tienen un significado legal y cada fabricante usa a su antojo o como gancho. En nuestra opinión, alegar propiedades que por definición los cosméticos deben poseer (como haber pasado un análisis de tolerancia y seguridad) no es más que un reclamo publicitario.

Ingredientes dudosos

En la lista de ingredientes nos fijamos en los que tienen algún riesgo o en los que hay dudas sobre su seguridad.

  • Butyl o propylparaben (dos tipos de parabenos o parabenes). Aunque se usen en cantidades pequeñas, y dentro de los límites permitidos, están empezando a ser eliminados de muchos productos en la UE. De hecho, ninguna de las cremas analizadas los contiene.
    Los parabenos son una familia de sustancias muy utilizadas en cosméticos por su actividad conservante; hay multitud de ellos, pero no todos son iguales: algunos han demostrado ser seguros, otros están más cuestionados y otros ya no se permiten en la UE. Nosotros desaconsejamos el propyl y el butylparaben en productos que permanecen sobre la piel porque se sospecha que pueden alterar el sistema endocrino.
  • Fragancias que pueden causar alergias. El uso de estas sustancias es legal en las condiciones que marca la normativa. Pero la ley también exige que se declaren en el etiquetado para que los consumidores o personas alérgicas puedan detectarlos antes de adquirir el producto.

Impacto ambiental del envase

Evaluamos su impacto ambiental en cuanto al material, aprovechamiento del contenido, peso en relación con la cantidad de crema y uso de caja de cartón.

  • Aprovechamiento del contenido. Medimos la cantidad de producto que queda sin aprovechar en el envase siguiendo los criterios ECO label europea. Las cremas en tarro obtienen muy buena valoración, ya que se tiene fácil acceso a todo el contenido, al contrario que pasa con los tubos, en los que es más difícil llegar a extraerlo por completo.
  • Material del envase primario. Con este parámetro queremos premiar a las marcas que utilizan los materiales con menor impacto ambiental teniendo en cuenta el ciclo de vida. También damos más puntos a los productos con material reciclado.
  • Ratio envase/producto. Se refiere a la relación entre el peso del envase y el del contenido. Mayoría de malos resultados (una y dos estrellas) vinculada al elevado peso de los tarros de cristal, pero incluso los envases de plástico son demasiado pesados en relación con la cantidad de crema.
  • Envase secundario. Evaluamos si el producto tiene un envase añadido y si puede reciclarse. Desde OCU pensamos que el envase de cartón es sobre embalaje, ya que hay espacio suficiente en el bote o tubo para respetar las obligaciones de la ley de cosméticos en materia de etiquetado. Todos los productos analizados vienen en una caja de cartón, por lo que obtienen mala valoración en este parámetro.

 

cremas hidratantes de cara