Abanca compra Targobank: ¿cómo te afecta?
Tras recibir las autorizaciones tanto del Banco Central Europeo (BCE) como de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia CNMC), ya ha finalizado el proceso de compra de TargoBank por parte de Abanca.
Este es el último paso para proceder a la integración definitiva, al menos desde el punto de vista jurídico. Sin embargo todavía hay que esperar a que se produzca la plena integración tecnológica para que ambas entidades puedan operar como una sola.
De momento Targobank seguirá operando bajo la marca “Targobank Grupo Abanca” y los clientes seguirán accediendo a sus cuentas a través del portal de Targobank, que seguirá operativo hasta la plena integración tecnológica, que se espera que se produzca ya en 2024.
¿Cómo afectará a los clientes?
Aparte de las cuestiones prácticas, como el cambio de IBAN que afectará a los clientes de Targobank, los procesos de integración casi siempre implican cambios en las condiciones de los productos contratados, dado que Abanca tendrá una oferta única de productos con condiciones diferentes a los que venía ofreciendo TargoBank hasta ahora: serán con toda probabilidad los antiguos clientes de Targobank quienes vean modificadas las condiciones de algunos de sus productos.
¿Pueden cambiarme las condiciones?
En función del tipo de producto que tengas contratado se respetarán las condiciones que tenías o tendrás que aceptar cambios. Ten en cuenta que hay dos tipos de contratos:
- Los contratos de duración determinada, como pueden ser los de un préstamo o un contrato de depósito a plazo fijo. Estos contratos tienen delimitada su duración y, salvo acuerdo entre las partes, no es posible modificar las condiciones pactadas, a no ser que existan motivos válidos especificados en el contrato: no podrán variar las condiciones de tu hipoteca, por ejemplo.
- Los contratos de duración indefinida, es decir, aquellos que no tienen un plazo de finalización determinado, como pueden ser los de una cuenta corriente, una tarjeta de crédito o una cuenta de ahorro: en este tipo de contratos la normativa establece que las entidades pueden modificar unilateralmente las condiciones, con el único requisito de comunicar esa modificaciones de manera individualizada con una antelación de al menos dos meses.
Si sales perjudicado, cambia de cuenta
Aunque los cambios no son inminentes, si la integración te supone un perjuicio, no te quedes de brazos cruzados y busca otra entidad que te ofrezca mejores condiciones. Para facilitarte dicha tarea, consulta el comparador de cuentas corrientes, donde podrás encontrar fácilmente la cuenta que mejor se adapta para su perfil.