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Bioplástico, la alternativa al plástico tradicional que aprueban los consumidores

El tiempo del plástico tradicional se acaba. El proyecto CIRC-PACK ha desarrollado un prototipo de envase de bioplástico hecho con material orgánico reciclado y compostable. Pero qué opinan los consumidores, ¿les gusta?, ¿lo comprarían incluso si costara algo más? En OCU se lo preguntamos. Parece que no hay excusas para que los bioplásticos empiecen a implantarse.

29 octubre 2019
Bioplásticos vs plástico tradicional

Hola bioplástico, ¿adiós plástico?

El plástico se ha ido acumulando en la naturaleza creando serios problemas medioambientales. Si tenemos en cuenta que el plástico es un material muy resistente a la degradación y que cada europeo tira 14 kilos de este material a la basura es evidente que hay que encontrar cuanto antes una solución.

Y en esto está CIRC-PACK. Un proyecto subvencionado por la Unión Europea que agrupa a 22 intervinientes en toda la cadena de valor del plástico (fabricantes de materiales y envases, de productos envasados, recicladores, centros de investigación, consultoras y OCU por parte de los consumidores) con el objetivo de buscar, producir y evaluar nuevos envases más sostenibles, tanto desde el punto de vista medioambiental como de sus implicaciones económicas y sociales.

CIRC PACK 

Bioplásticos, origen y características

El trabajo de todos ha generado varios prototipos de envases que proceden de material orgánico renovable y que además es fácilmente compostable. Démosle la bienvenida a los bioplásticos.

Este nuevo prototipo de envase está elaborado a partir de, entre otras cosas, celulosa de pañales, compresas y absorbentes que, mediante diferentes procesos de separación y fermentación y en combinación con aditivos igualmente renovables, dan lugar a los bioplásticos. Es decir, estos bioenvases provienen de materia orgánica que iba a ser desechada y a su vez puede volver a reciclarse cerrando el círculo.

Los consumidores aprueban los bioenvases

Y qué dicen los usuarios de este nuevo material, ¿les convence? ¿los usarían? ¿pagarían más por ellos? De nada serviría desarrollar un nuevo producto si los consumidores que son quienes van a comprarlos y usarlos, no lo hicieran.

Por lo tanto, para saber la opinión de los consumidores, en OCU nos encargamos de realizar un test de envase, un estudio de mercado con consumidores que in situ probaban y daban su opinión sobre los bioenvases sin saber que estaban hechos con material orgánico y además los comparaban con los envases de plástico tradicional. En este video puedes ver cómo se desarrolló la jornada en Madrid.

Test de envases : 6 ciudades, 180 personas, 7 productos

Esta prueba se realizó en 6 ciudades europeas diferentes: Madrid, Lisboa, Milán, Bruselas, Rijeka (Croacia) y Kartal (Turquía) y en cada una de ellas citamos a 30 personas representativas por género y edad, que habitualmente toman las decisiones de compra en sus hogares. Les entrevistamos de manera individual siguiendo un cuestionario previamente definido en torno a 7 productos:

Una bandeja para productos frescos, una cápsula para café, un bote de champú, una bolsa de un solo uso, una bolsa reutilizable, una caja de detergente y un paquete de compresas.

De uno en uno les fuimos mostrando los dos envases, el tradicional y el de bioplástico, primero de manera individual y luego en conjunto sin decirles cuál era cuál para que valoraran los siguientes aspectos. 

En algunos envases, además se preguntó por atributos específicos, por ejemplo en el caso de las bolsas si se abren fácilmente o si desprenden buen olor.

Demostrado: los consumidores prefieren los bioenvases

Después de recoger los resultados que los encuestadores apuntaban en una Tablet, los analizamos y concluimos que mayoritariamente los consumidores consultados prefieren los bioenvases en casi todos los aspectos o, al menos, tendrían la misma aceptación que los envases actuales.

Además tres cuartas partes compraría los bioenvases aunque costaran hasta un 20% más, aunque el porcentaje desciende a medida que se proponen precios más altos.

Te destacamos a continuación algunos de los resultados.

  • Bandeja para productos frescos. Los usuarios destacan que son más fáciles de comprimir al tirarlas, pero prefieren la bandeja tradicional por su aspecto y, sobre todo, resistencia (un 41 % más se inclinan por ella, aunque es solo un 13 % en España). Solo el 11 % la tiraría al contenedor orgánico si no lo indicara.

Bandejas de productos frescos

  • Cápsulas de café. Las de bioplástico fueron favoritas en resistencia, estética y facilidad de uso. El 89 % de los usuarios las compraría y hasta un 22 % sin importarles el precio.

Bioplásticos, cápsulas de café

  • Bote de champú. A primera vista, el bote tradicional gana por su aspecto visual, pero en resistencia empata con el bioplástico (no en España, donde hay un 30 % más a favor del nuevo). La mayoría de los usuarios pagaría algo más por el nuevo envase. Al reciclarlo, el 68 % lo tiraría con los envases si no se le informa.

Bioplásticos bote de champú

  • Bolsas de un solo uso. La nueva bolsa se enfrentó a una fabricada con plástico convencional y otra de plástico reciclado. Fue preferida en todos los aspectos excepto en la resistencia. Incluso un 90 % pagaría más por ella.

Bioplásticos un solo uso

  • Bolsas reutilizables. El modelo de bioplástico fue la gran favorita en todos los criterios frente a las fabricadas con plástico convencional o reciclado. En España el 97 % elegiría la bolsa de bioplástico y un 14 % incluso si costara un 50 % más. Cuatro de cada diez la tirarían al contenedor de orgánico sin información específica al respecto.

Bioplásticos bolsas multiusos

  • Envases de detergente. Eran cajas de cartón recubiertas interiormente de plástico en el caso convencional y solo de cartón en el nuevo. Para la mayoría de los usuarios eran iguales, pero destacaron la mayor facilidad de apertura del bioenvase. Un 17 %  de ellos no pagaría más por el nuevo producto.

Bioplásticos detergentes

  • Paquete de compresas. Muchas consumidoras los vieron similares, pero el nuevo envase está algo mejor valorado en todos los aspectos. Destacaron la mejor legibilidad de su etiqueta, con menos brillo. El 98 % lo comprarían a igualdad de precio y el 78 % si costara hasta un 20 % más caro.

Bioplásticos caja de compresas

Sabiendo esto, podemos decir que los bioenvases han superado la prueba de los consumidores. En realidad quedan pocas barreras funcionales o económicas a su implantación. No hay excusas para sustituir al plástico por los bioenvases. Ahora queda que los fabricantes los produzcan y utilicen a gran escala.