¿Cuánto duran los paneles solares?

Las instalaciones fotovoltaicas son cada vez más populares, pero algunos agoreros advierten de que vas a tener que reinvertir en ellas porque las placas tienen una duración limitada. En efecto, lo mismo que cualquier otro material, un panel fotovoltaico se puede desgastar con el tiempo, pero está comprobado que su duración habitual permite amortizar la instalación sobradamente siempre y cuando haya estado bien dimensionada. 

¿Cuál es la vida útil de un panel solar?

La mayoría de los fabricantes anuncian una vida útil de 25-30 años, no porque después de este tiempo dejen de funcionar, sino porque van perdiendo rendimiento, en torno a un 0,5% por año. Sin embargo, el primer panel fotovoltaico tiene más de 60 años y aún sigue funcionando. En realidad, no existe un único estándar para medir la vida útil de los paneles solares común a todos los fabricantes, por lo que los datos que aportan pueden no ser comparables.

En nuestros análisis comparativos hacemos pruebas con las mismas condiciones para todos los paneles, que permiten estimar su duración. Es un criterio importante porque la durabilidad de los paneles solares afecta directamente a la rentabilidad de la inversión.  

Los paneles solares duran mucho porque están preparados para soportar sin quebrarse la fuerza del viento y otros factores externos. Las placas tampoco tienen partes móviles que se puedan averiar, pero hay otras piezas de las instalaciones fotovoltaicas, como los inversores, cuya vida útil estimada es menor, aproximadamente 10 años. Seguramente, habrá que utilizar 2 inversores durante la vida de un panel fotovoltaico. El coste medio de un inversor es de 800 euros.

Factores que afectan a la duración de los paneles solares

El tipo de panel (tecnología PERC, Heterounión, etc.) influye en su durabilidad, pero también hay otros factores que además afectan a su rendimiento y rentabilidad:

1. Clima y fenómenos atmosféricos

• Temperaturas muy altas combinadas con alta intensidad de radiación solar.
• Temperaturas excesivamente bajas.
• Fuertes granizadas.
• Fluctuaciones de temperaturas altas combinadas con fuerte viento.
• Exceso de humedad durante largos periodos de tiempo.

2. Defectos o microfisuras que van creciendo con la exposición solar (en nuestro análisis comprobamos si las placas presentan este tipo de problemas). Pueden afectar a las conexiones eléctricas e influir en cuánta electricidad produce el panel e incluso la instalación en conjunto.

3. Fallos en la caja de conexiones, que implicará degradación en las placas fotovoltaicas.

4. Suciedad, aunque depende del tipo y la cantidad de suciedad. No es lo mismo una suciedad concentrada, como un excremento de pájaro, que una suciedad de polvo atmosférico. Si los paneles están conectados en cadena uno con otro, la suciedad en una sola placa afectará a todas las demás, puesto que el rendimiento del conjunto será el del panel de menor rendimiento.

¿Cómo alargar la vida útil de los paneles solares?

Igual que con cualquier otro producto, un uso y mantenimiento correctos son fundamentales para optimizar su funcionamiento y alargar su vida útil.

• Uso: la instalación debe ser correcta, en cuanto a su inclinación, orientación y ausencia de sombras.
• Mantenimiento: no requieren mucho mantenimiento en general, pero sí conviene asegurarse de que se encuentran limpios. Si no es así, habrá que proceder a su limpieza.

El inversor se debe situar en un lugar bien ventilado para evitar que se sobrecaliente, pues la conversión de energía solar en electricidad supone una carga alta.

¿Cuándo hay que sustituir los paneles solares?

A pesar de haber hecho un buen uso y un  mantenimiento correcto, puede que tengas que sustituir alguno de tus paneles. Comprar un panel nuevo cuesta, de media, 180 euros. Estas son algunas razones que hacen aconsejable cambiar un panel solar:

• Su eficiencia ha disminuido: si tus paneles tienen muchos años (más de 20), es posible que su eficiencia al producir electricidad haya disminuido y que convenga pensar en cambiarlos. Normalmente, tendrás una app que te indica cuánta energía se está produciendo o lo podrás comprobar en las facturas que te mande tu compañía si tienes compensación de excedentes.
• Daños visibles: si observas grietas o zonas dañadas, pueden afectar negativamente la capacidad del panel para captar la luz solar. Si el daño es significativo, es recomendable sustituir el panel.
• Tecnología obsoleta: los continuos avances en esta tecnología hacen que los paneles más antiguos sean comparativamente menos eficientes que los nuevos. Considera reemplazarlos para aprovechar las últimas innovaciones en tecnología fotovoltaica.
• Fallos frecuentes: si tus paneles solares han requerido reparaciones frecuentes y los problemas persisten, podría ser más rentable y eficiente a largo plazo reemplazarlos por paneles más nuevos y fiables.

¿Qué hacer con los paneles sustituidos?

Una vez que un panel solar ha funcionado durante el mayor tiempo posible, llega el momento de desmantelarlo. Pero ¿qué se hace con un panel solar que ya no funciona Tendríamos varias posibilidades para este final de vida de nuestros paneles:

• Reparar y reutilizar: se podrían reparar y distribuir nuevamente para otras instalaciones. Sin embargo, crea desafíos económicos y regulatorios, ya que los paneles pueden requerir inspección, reparación, pruebas y, en algunos casos, recertificación.
• Restaurar o remanufacturar: los fabricantes pueden recuperar los paneles para extender aún más su vida útil o la de sus componentes. Existirían los mismos problemas económicos y regulatorios que con la reparación y la reutilización.
• Reciclar los paneles: recuperar los materiales alivia el impacto ambiental y tiene un valor económico. El vidrio, los polímeros, el aluminio, el silicio, el cobre y otros materiales que componen los paneles solares se pueden extraer, vender y procesarse para otros fines. Esto ayuda a mantener los materiales en circulación.

¿Cómo se desechan los paneles fotovoltaicos?

De acuerdo con la legislación vigente, los paneles usados se tratan como residuos de “equipos eléctricos y electrónicos”. Al tratarse de un residuo voluminoso compuesto por diversos materiales, no se puede levar a un contenedor como si fueran un residuo ordinario. Hay que ponerse en contacto con una empresa especializada. Según las directrices de la UE, la responsabilidad del reciclaje de los paneles solares recae en los fabricantes, pero suelen ser los propietarios de las instalaciones quienes se encargan de desmantelarlas y encauzar la eliminación de los componentes de los sistemas fotovoltaicos. 

El primer paso en el proceso de reciclaje de paneles solares es desmontar la instalación desconectando los cables y otros dispositivos. Los materiales se separan y se someten a procesos de eliminación o reciclado diferentes:

• El vidrio y el aluminio se reciclan hasta en un 90%–100% y se funden en materias primas para su posterior producción.
• Hasta el 80 % de las obleas de silicio suelen ser reutilizables después del grabado ácido y el enriquecimiento. Las obleas dañadas se funden y se utilizan para la producción de nuevos paneles solares.
• Los componentes restantes se funden a 500°C para evaporar los elementos plásticos.

Paneles fotovoltaicos: renovables, sin duda

Los paneles fotovoltaicos de silicio tienen un impacto ambiental de ciclo de vida bajo en comparación con la mayoría de las formas convencionales de energía, como el carbón y el gas natural. Las mayores emisiones de carbono son las asociadas con la producción de módulos. En general, los paneles fotovoltaicos de silicio amortizan los costos de producción de energía iniciales requeridos mucho antes de su vida útil y son generadores de energía neta limpia durante la mayor parte de su vida útil.

Las emisiones totales del ciclo de vida asociadas con la producción de energía fotovoltaica son más altas que las de la energía nuclear, pero más bajas que las de la producción de energía de combustibles fósiles:

• Paneles fotovoltaicos: 45 g/kWh
• Carbón: 900 g/kWh
• Gas natural: 400-439 g/kWh
• Energía nuclear: 20-40 g/kWh

Durante su vida de 25-30 años los módulos solares generan más electricidad de la que se consumió durante su producción, de forma que el tiempo promedio de recuperación de energía es de 3-6 años.

Placas fotovoltaicas de segunda mano, ¿interesan?

Hay un mercado de placas de segunda mano en algunas web muy populares, como e-Bay, Amazon o Wallapop y también en páginas especializadas. La cuestión es si es buena idea comprar paneles solares usados o no.

Como norma general podríamos decir que no interesarán. La razón es que no es fácil para el comprador comprobar su estado, el rendimiento real, si tiene microfisuras internas, etc. Pero evidentemente si consigues un panel de segunda mano con un rendimiento aceptable y buen precio, se reducirían considerablemente los costes de la instalación, acortando el plazo para amortizarla.

¿Cuánto cuestan los paneles solares de segunda mano? Los precios varían según la calidad de las placas solares y la urgencia del vendedor. En las plataformas de segunda mano se pueden encontrar paneles solares por 0.10 €/Wp, esto es, por una cuarta parte del precio de un panel nuevo de calidad media.

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No obstante, la tecnología avanza y los costes se reducen, por lo que si estás pensando en renovar o ampliar tu instalación, puedes beneficiarte de descuentos en tu instalación gracias a la compra colectiva de OCU:

Compra colectiva de paneles solares

Y también te contamos qué paneles han tenido los mejores resultados en nuestro análisis: