Noticia

¡Súmate a la eficiencia energética!

11 junio 2018
eficiencia-energetica

La finalidad de la eficiencia energética no es otra que proteger el medio ambiente del consumo energético abusivo de los seres humanos. Para ello, es importante que nos acostumbremos a utilizar únicamente la energía que necesitamos en nuestro día a día y que, además, hagamos un consumo energético más responsable y “verde”.

La actual política energética en Europa cuenta con 3 objetivos principales:

  • Reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
  • Aumentar la producción con energías limpias. 
  • Aumentar la eficiencia energética. 

Eficiencia energética

Para cumplir con estos objetivos, resulta de vital importancia la implicación de todos. Por eso, nosotros como consumidores también debemos aportar nuestro granito de arena para favorecer el ahorro de energía, implicándonos más y adquiriendo una consciencia medioambiental.

¿Cómo podemos ahorrar energía?

No hay duda de que la energía más limpia y menos contaminante es la que no se consume. Sin embargo, y aunque nuestra intención sea buena, a veces no somos realmente conscientes de la cantidad de energía que desperdiciamos a diario.

Si estás interesado en convertirte en un usuario más eficiente a nivel energético, contaminar menos y reducir tu consumo, aquí te dejamos unos trucos que te pueden ayudar:

1. Utiliza tecnologías “verdes”: como consumidor puedes optar por cambiar los electrodomésticos que utilizas más (nevera, lavadora, lavavajillas, horno…) por aparatos más eficientes, iluminar tu casa con tecnología LED, comprarte un coche que consuma menos (híbrido o eléctrico), etc. Además del uso de aparatos ecológicos, también puedes elegir calentarte con biomasa o recurrir a una climatización eficiente. 

Importancia del ahorro de energía

Aunque el ahorro que se consigue con estos cambios es mayor, es verdad que requieren una inversión importante dependiendo de la tecnología.

2. Adopta nuevos hábitos: si cambias el chip en casa y te acostumbras a ciertas rutinas, podrías ahorrar energía y dinero. Algunos ejemplos son:

  • Utiliza la lavadora y el lavavajillas al máximo de su capacidad.
  • Apaga las luces cuando no te encuentres en la estancia.
  • Utiliza la climatización de manera responsable (no más de 21ºC en invierno, ni menos de 24ºC en verano) y sólo cuando estés presente.
  • Ajusta la ropa que llevas a la estación del año.
  • Cuando cocines, aprovecha la energía para hacer el mayor número de cosas posibles (por ejemplo: si enciendes el horno, intenta cocinar varias cosas)
  • Dúchate en vez de bañarte y no tengas el grifo abierto mientras te enjabonas.
  • No abras la puerta del frigorífico más que lo imprescindible, no metas comida caliente, descongela dentro de la nevera, etc.
  • Utiliza transporte público en lugar del coche para desplazarte por la ciudad.

La principal ventaja de ahorrar energía mediante un cambio en nuestros hábitos es que no supone ninguna inversión inicial y, por tanto, todo el ahorro que consigamos se traduce directamente en un ahorro para nuestro bolsillo. El inconveniente es que, dependiendo de lo concienciados que estemos ya, el ahorro posible es menor.

¡Participa en nuestra comunidad!

En OCU somos partícipes del proyecto europeo CLEAR 2.0, RenoVamos, que trata de dar a conocer la eficiencia energética a los consumidores y fomentar el uso de energías renovables. Para ello, hemos creado una comunidad de usuarios, donde podrás acceder a todo tipo de información y servicios, plantear tus dudas y consultar a nuestros expertos.

ÚNETE A LA COMUNIDAD DE ENERGÍAS RENOVABLES