Actualización a Windows 10 sin tu permiso
Si tienes un ordenador con Windows 7 u 8, presta atención. Microsoft aprovecha su mecanismo de actualización automática para programar la instalación de Windows 10 sin autorización expresa. Aunque en general lo desaconsejamos, si es tu deseo, mira cómo impedir el cambio.
Algunos usuarios que trabajaban con las versiones 7, 8 y 8.1 de Windows se han visto sorprendidos con la instalación de Windows 10 en su ordenador, la última versión del sistema operativo de Microsoft. El cambio puede ser evitado si se cancela a tiempo, pero los intentos de persuasión en forma de notificaciones pop-up son constantes.
La raíz del problema está en el mecanismo de actualización automático presente en Windows 7, 8 y 8.1 para corregir errores y comprobar si hay actualizaciones, entre otros fines. En general, es aconsejable mantenerlo activado, ya que realiza una monitorización y mantenimiento regulares del sistema. Normalmente, solo los usuarios avanzados desactivan el mecanismo, en busca del control total de su ordenador.
Con el lanzamiento de Windows 10 en julio de 2015, Microsoft anunció que los usuarios con licencias para Windows 7, 8 y 8.1 podrían obtenerlo de forma gratuita hasta el 29 de julio de 2016. Sin embargo, tiempo después, Microsoft decidió incluir este cambio a Windows 10 en las actualizaciones regulares de las versiones 7, 8 y 8.1 en forma de actualización recomendada. El resultado es la planificación automática del cambio a Windows 10, que los usuarios pueden aceptar o no. El sistema lanza notificaciones que el usuario puede posponer, pero muchos se encuentran por sorpresa con el nuevo sistema operativo al iniciar el ordenador.
¿Es conveniente el cambio a Windows 10?
Desde nuestro punto de vista, ser prudente a la hora de actualizar el sistema operativo puede ser conveniente para quien utiliza programas profesionales que no tienen soporte en el nuevo Windows 10, pero en general desaconsejamos renunciar a la evolución de la tecnología. Si decides esperar un tiempo para realizar el cambio, debes saber que a partir del 29 de julio de 2016 el precio de Windows 10 pasa a ser 135 €. Si el nuevo sistema operativo de Microsoft no es de tu agrado, puedes valorar otras opciones como adquirir un MAC o utilizar GNU/Linux.
Desde OCU creemos que el cambio a Windows 10 debe partir de una elección informada y no una actualización automática e impuesta, lo que viola el necesario consentimiento previo para enviar estas comunicaciones no solicitadas, de acuerdo con la legislación de protección de los consumidores.
Algunos usuarios que trabajaban con las versiones 7, 8 y 8.1 de Windows se han visto sorprendidos con la instalación de Windows 10 en su ordenador, la última versión del sistema operativo de Microsoft. El cambio puede ser evitado si se cancela a tiempo, pero los intentos de persuasión en forma de notificaciones pop-up son constantes.
La raíz del problema está en el mecanismo de actualización automático presente en Windows 7, 8 y 8.1 para corregir errores y comprobar si hay actualizaciones, entre otros fines. En general, es aconsejable mantenerlo activado, ya que realiza una monitorización y mantenimiento regulares del sistema. Normalmente, solo los usuarios avanzados desactivan el mecanismo, en busca del control total de su ordenador.
Con el lanzamiento de Windows 10 en julio de 2015, Microsoft anunció que los usuarios con licencias para Windows 7, 8 y 8.1 podrían obtenerlo de forma gratuita hasta el 29 de julio de 2016. Sin embargo, tiempo después, Microsoft decidió incluir este cambio a Windows 10 en las actualizaciones regulares de las versiones 7, 8 y 8.1 en forma de actualización recomendada. El resultado es la planificación automática del cambio a Windows 10, que los usuarios pueden aceptar o no. El sistema lanza notificaciones que el usuario puede posponer, pero muchos se encuentran por sorpresa con el nuevo sistema operativo al iniciar el ordenador.
¿Es conveniente el cambio a Windows 10?
Desde nuestro punto de vista, ser prudente a la hora de actualizar el sistema operativo puede ser conveniente para quien utiliza programas profesionales que no tienen soporte en el nuevo Windows 10, pero en general desaconsejamos renunciar a la evolución de la tecnología. Si decides esperar un tiempo para realizar el cambio, debes saber que a partir del 29 de julio de 2016 el precio de Windows 10 pasa a ser 135 €. Si el nuevo sistema operativo de Microsoft no es de tu agrado, puedes valorar otras opciones como adquirir un MAC o utilizar GNU/Linux.
Desde OCU creemos que el cambio a Windows 10 debe partir de una elección informada y no una actualización automática e impuesta, lo que viola el necesario consentimiento previo para enviar estas comunicaciones no solicitadas, de acuerdo con la legislación de protección de los consumidores.
Para impedir el cambio, es necesario revisar la lista completa de actualizaciones programadas. Puedes hacerlo en Configuración->Actualización y seguridad->Windows Update. Teniendo en cuenta que en promedio se programan una docena cada dos semanas, es fácil que la de Windows 10 se escape de nuestro radar.
En Opciones Avanzadas desactiva también la instalación automática, escogiendo en el menú desplegable Notificar para programar reinicio.
Si por cualquier motivo deseas volver a tu antigua versión de Windows, puede hacerlo en el plazo de un mes desde que se instaló el nuevo Windows 10 a través de la actualización. Para ello, debes acudir a Configuración->Actualización y seguridad->Recuperación y seleccionar la opción para volver a tu sistema operativo anterior (7/8/8.1). Esta opción desaparecerá al expirar los 30 días.
Esta actualización automática de Microsoft podría estar relacionada con el cambio de paradigma de Windows 10. Además de un sistema operativo, esta nueva versión es una plataforma de productos y servicios, herramientas de monitorización y recopilación de datos. La existencia de versiones tanto para escritorio como para dispositivo móvil es también un reflejo de esta evolución. Microsoft busca proporcionar una experiencia unificada en todos los dispositivos: ordenador, tableta y smartphone. Windows 10 deja atrás muchas funcionalidades de Windows 8.1, pero supera a sus antecesores en versatilidad y utilidad. Ejemplos de ello son el asistente Cortana, similar a Siri de Apple, el nuevo navegador Microsoft Edge y otras innovaciones en su interfaz, la cual combina elementos tradicionales como el famoso botón “Inicio” con otros más modernos como las Live Tiles, el mosaico interactivo ya introducido en Windows 8.1.
El uso de estas nuevas funcionalidades requiere de la expresa autorización del usuario previo aviso legal acerca de la privacidad de los datos, existiendo la posibilidad de que el ordenador funcione correctamente sin usar ninguno de estos nuevos servicios. Por ello, si no deseas otorgar estos permisos porque recelas del uso que podría hacer Microsoft de los datos que recopila, puedes optar por no usar las nuevas funciones.
Pero Microsoft también ha incluido mejoras de la seguridad. Windows 10 también incorpora algunas mejoras respecto a sus predecesores. Por ejemplo, no permite que el ordenador esté sin antivirus, si se caduca el que está instalado, lo desactiva automáticamente y activa el que viene integrado en el sistema operativo (Windows Defender), algo parecido ocurriría si el antivirus se desactivara por error, Windows 10 lo activaría automáticamente en 15 minutos. La versión más actualizada de Windows 10 (Threshold 2) permite escanear rápida y fácilmente un fichero con el botón derecho del ratón. El firewall ahora no deja ningún puerto abierto, y eso significa menos puertas abiertas a los programas maliciosos y se prevé que con la siguiente actualización que se lanzará en verano (Windows 10 Redstone) se unificarán en un solo lugar el firewall y el Windows Defender, para que sea aún más sencillo tener controlada la seguridad del PC. Por último, las actualizaciones son automáticas sí o sí, así que no tendrás que preocuparte por los parches de seguridad.