¿Planchar con agua del grifo o destilada?

A lo mejor tu plancha todavía tiene arreglo si la limpias y descalcificas con cuidado para evitar que manche la ropa y que la suela se pegue. Si la ves irrecuperable y necesitas comprar otra, OCU te ayuda a elegir el mejor aparato en función de tus necesidades: 

COMPARADOR DE PLANCHAS Y CENTROS DE PLANCHADO

Objetivo: una plancha en buen estado

Una vez que tengas tu plancha flamante, querrás saber cómo cuidarla para que no te vuelva a pasar. Aparte de hacer un mantenimiento regular, es importante que elijas bien el agua con la que rellenas el depósito.

Algunos fabricantes recomiendan en sus instrucciones usar agua destilada o desmineralizada, pero ¿en qué se diferencian del agua del grifo? 

Agua del grifo, destilada y desmineralizada

El agua destilada y el agua desmineralizada están libres de sales y, por eso, se recomiendan para rellenar la plancha. A efectos prácticos, estas dos aguas son parecidas, aunque se distinguen por la forma en que se obtienen:

• Agua destilada: se obtiene hirviendo el agua para recoger el vapor de agua generado. Es más pura que el agua corriente, porque está libre de  partículas sólidas, como la cal. Un litro de agua destilada te puede costar entre 0,50 y 2,50 euros.
• Agua desmineralizada: se eliminan todas sus sales minerales mediante un tratamiento químico. Su precio es bastante similar al del agua destilada, entre 0,50 y 3,00 euros por litro aproximadamente.

A diferencia de ellas, el agua del grifo puede ser muy dura en algunas zonas. Esto quiere decir que contiene gran cantidad de sales de calcio y magnesio que se suelen depositar en el interior de los electrodomésticos y causan averías (puedes consultar el nivel de dureza en la web de tu ayuntamiento o compañía de aguas, o en el mapa de dureza). Incluso si estás tratando el agua del grifo con un descalcificador, seguramente este le añade alguna sal que, junto con las altas temperaturas de la plancha o el centro de vapor, puede obstruir o dañar el aparato. Además, también puede volverse blanca o marrón, dependiendo del tipo de sal, y manchar la ropa. La ventaja importante es que el agua del grifo es mucho más barata (0,0017 €/l de precio medio en España), según nuestro último estudio de precios del agua.

¿Qué agua se debe utilizar para planchar?

Parece evidente que para evitar los depósitos de cal sería aconsejable usar agua destilada o desmineralizada. El problema es que estas dos aguas pueden volverse ácidas rápidamente y corroer las piezas de hierro o dañar los sistemas anti-cal del electrodoméstico. Así que usar agua destilada o desmineralizada solo será una ventaja si el agua de tu casa contiene mucha cal.

La solución: mezclar

• Puedes rellenar el depósito con agua del grifo si no es excesivamente dura. 
• Si el agua del grifo tiene mucha cal o dureza, se recomienda mezclarla con agua destilada o desmineralizada para obtener un agua más blanda. Los fabricantes desaconsejan usar únicamente de agua destilada o desmineralizada. 

Aparte de cuidar el agua que le pones, para evitar manchas en la ropa procura limpiar periódicamente la suela de la plancha caliente con un paño húmedo o una esponja no metálica. Evita también colocarla de plano sobre metal ya que esto podría dañar o rayar la suela.

La cal es inevitable

En mayor o menor medida todas las planchas de vapor sufren los ataques de la cal, que se deposita obstruyendo la cámara de vapor. Los fabricantes ofrecen varias soluciones. Las planchas simples (sin generador de vapor) suelen utilizar alguno de estos tres sistemas para descalcificar:

• "Choque térmico": solo se calienta la suela de la plancha, pero no el agua del depósito. Al pulsar el botón de descalcificación, el agua (fría) pasa a través de las perforaciones de la suela (caliente), que descompone las partículas de cal.
• Varilla antical: sobre ella se fija la cal y que hay que limpiarla periódicamente con vinagre.
• Casete antical: actúa químicamente para reducir la formación de estos depósitos. Una luz o una señal audible indican cuándo tienes que reemplazar el casete.