Comprar viagra en internet es fácil
La venta de medicamentos por internet es habitual y a menudo ilegal. No es solo Viagra, Reductil o Cytotec. Hay mucho más: una amplia botica sin garantías amenaza la salud del consumidor.
A todos nos llegan correos electrónicos animándonos a comprar medicamentos por internet. No es solo Viagra, también hay codeína, ansiolíticos, fármacos para adelgazar, abortar, dormir, permanecer despierto... Una completa y peligrosa botica por la que moverse a golpe de clic.
¿Qué hay detrás de estas páginas?
El 50% de los fármacos online son falsos
Muchas páginas web ofrecen medicamentos que solo deberían venderse con receta. Al hacerlo, se sitúan fuera de la ley, en una tierra de nadie en la que el paciente queda desamparado. Hay razones para alarmarse: la mitad de los fármacos que circulan por la red son falsos, adulterados o incluso tóxicos, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
En España está prohibida la venta en internet de fármacos que requieran receta médica. No es una prohibición arbitraria: ciertas páginas venden productos que no han sido inspeccionados por las autoridades. No hay garantía sobre su composición ni calidad, tampoco hay ningún profesional (médico o farmacéutico) que nos avise de las contraindicaciones.
Automedicarnos con productos que ni siquiera sabemos lo que son, a esto se reduce buena parte del tráfico online de fármacos.
A la caza de los mercaderes clandestinos
En un proyecto subvencionado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), la OCU ha identificado páginas que venden medicamentos ilegalmente. Nos hemos centrado en aquellas que operan en España (contra las que la AEMPS puede actuar) y en los fármacos que entrañan mayor riesgo si se toman sin la supervisión de un profesional:
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Disfunción eréctil: Viagra es el más popular representante de este grupo de fármacos. Desde 2008 es uno de los términos más buscados en la web. Omnipresente en los correos spam. Su principio activo es el sildenafilo.
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Adelgazantes: La obsesión por la estética convierte a la sibutramina (prohibida en Europa) en uno de los principios activos más buscados en internet. Como marca, Reductil se lleva la palma.
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Psicofármacos: Sin llegar a las cotas de los anteriores, algunos como la codeína (analgésico) y los ansiolíticos son muy demandados. A menudo se utilizan como drogas recreativas.
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Abortivos: Una de las franjas más sórdidas de la red. El mejor ejemplo es el Cytotec, medicamento autorizado para úlceras y lesiones gastrointestinales pero usado clandestinamente como abortivo. En internet es especialmente buscado en países con poca cultura anticonceptiva, como Bolivia y Filipinas.
La OCU ha analizado el lugar al que van los consumidores cuando indagan en internet: Google. El buscador de referencia ha sido el escenario en el que llevar a cabo buena parte de la investigación. Hemos realizado más de 2.300 búsquedas introduciendo los nombres y términos asociados de los medicamentos más demandados en la red.
Hay 400 páginas actuando en España
Hemos detectado 400 páginas que operan ilegalmente en nuestro país. Más de 300 se dedicaban a promocionar el comercio de fármacos que requerían receta y redirigir hacia páginas de venta. Un total de 81 fueron identificadas como vendedoras directas de medicamentos.
No solo actuaban con impunidad y ponían en peligro la salud del consumidor. Además, el 24% de estas páginas tenía acuerdos comerciales con Google. Los dueños de la web pagaban dinero a Google a cambio de que este les colocase en los primeros puestos de los resultados de búsqueda, formando parte de sus "enlaces patrocinados".
Afortunadamente, nuestro estudio ha servido para que la AEMPS entrase en acción. Desde entonces, el número de páginas ilegales patrocinadas por Google ha caído de 97 a 8.
Habla el experto: "Comprar un fármaco online es sencillo"
La ardua tarea de rastrear la red e identificar las páginas ilegales fue llevada a cabo por un especialista en marketing online y comercio electrónico de reputada trayectoria. "Es una zona oscura de internet, como pueden serlo el mundo de las apuestas y el contenido para adultos", comenta este especialista. Navegó por miles de web y se comportó como un consumidor que quería engañar al sistema ("si hacía falta mentir, mentía") para hacerse con Viagra, Reductil, Cytotec...
Pagó con tarjeta y recibió por correo todo tipo de fármacos por los que deberían haberle exigido receta médica. "Es preocupante lo sencillo que resulta. Es más fácil comprar una caja de Viagra que un billete de tren a Zaragoza".
El 15% del spam que circula por internet está relacionado con la venta de fármacos, según datos del antivirus Kaspersky. Pese a la contundente cifra, sigue habiendo quien facilita información personal a este sector que se mueve en zonas oscuras a las que la legalidad no llega. Además del correo electrónico (con el inevitable spam), muchas páginas piden datos más sensibles, como el historial médico. Esta información puede después ser utilizada para otros fines o vendida al mejor postor.
Un sector ilegal pero en auge: 10% de crecimiento anual
"Siempre hay que tener cuidado cuando se navega, pero mucho más cuando se navega por los bordes", resume nuestro especialista para referirse a la tierra fronteriza en la que se encuentra la venta online de medicamentos. "Te encuentras de todo. El 25% de las páginas que identificamos operaban desde Andorra, donde están muy profesionalizados. También hay tiendas internacionales. Y por supuesto todo un pequeño mar de menudeos: alguien a quien le han sobrado dos cajas de un abortivo y quiere venderlo, alguien que te dice que le pidas lo que quieras y él te lo consigue...".
Internet garantiza el anonimato para ambas partes, la ausencia de preguntas incómodas, pero deja al consumidor sin garantías, sin seguridad, sin privacidad. La mejor defensa es estar informado y ser responsable, ya que el sector no da muestras de agotamiento. "El comercio electrónico en España está experimentando un boom que se notará también en estas actividades ilegales. Calculo que, en un año, las farmacias online estarán ganando un 10% más", sentencia nuestro experto en e-commerce.
Lejos de farsantes se vive mejor
Para estar seguro y saber con lo que te curas, elije una farmacia de las de toda la vida. A día de hoy siguen siendo las únicas que ofrecen garantías. Aléjate de quien te ofrezca medicamentos que requieren receta sin pedírtela. Al hacer esto, el vendedor se sitúa fuera de la ley. ¿De verdad quieres tener tratos con un mercader clandestino?
No ayudes a enriquecerse a quien gestiona chiringuitos de dudosa reputación. Los mismos que en mayo de 2011 vendieron Melatonan (un bronceador que incluye cáncer de piel entre sus efectos secundarios) a dos jóvenes de Valencia que tuvieron que ser hospitalizados por melanoma y repentina aparición de lunares. En aquella ocasión la AEMPS consiguió que se retirasen varios anuncios online de este peligroso producto.
Por no hablar de misteriosos suplementos que ocultan potentes fármacos en su interior, como el adelgazante Fruta Planta Reduce Weight, retirado por la AEMPS de las tiendas en octubre de 2010. No figuraba en su etiqueta, pero el principio activo era sibutramina, un estimulante prohibido en Europa que puede causar serios problemas cardiovasculares.
A todos nos llegan correos electrónicos animándonos a comprar medicamentos por internet. No es solo Viagra, también hay codeína, ansiolíticos, fármacos para adelgazar, abortar, dormir, permanecer despierto... Una completa y peligrosa botica por la que moverse a golpe de clic.
¿Qué hay detrás de estas páginas?
El 50% de los fármacos online son falsos
Muchas páginas web ofrecen medicamentos que solo deberían venderse con receta. Al hacerlo, se sitúan fuera de la ley, en una tierra de nadie en la que el paciente queda desamparado. Hay razones para alarmarse: la mitad de los fármacos que circulan por la red son falsos, adulterados o incluso tóxicos, según datos de la Organización Mundial de la Salud.
En España está prohibida la venta en internet de fármacos que requieran receta médica. No es una prohibición arbitraria: ciertas páginas venden productos que no han sido inspeccionados por las autoridades. No hay garantía sobre su composición ni calidad, tampoco hay ningún profesional (médico o farmacéutico) que nos avise de las contraindicaciones.
Automedicarnos con productos que ni siquiera sabemos lo que son, a esto se reduce buena parte del tráfico online de fármacos.
A la caza de los mercaderes clandestinos
En un proyecto subvencionado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), la OCU ha identificado páginas que venden medicamentos ilegalmente. Nos hemos centrado en aquellas que operan en España (contra las que la AEMPS puede actuar) y en los fármacos que entrañan mayor riesgo si se toman sin la supervisión de un profesional:
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Disfunción eréctil: Viagra es el más popular representante de este grupo de fármacos. Desde 2008 es uno de los términos más buscados en la web. Omnipresente en los correos spam. Su principio activo es el sildenafilo.
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Adelgazantes: La obsesión por la estética convierte a la sibutramina (prohibida en Europa) en uno de los principios activos más buscados en internet. Como marca, Reductil se lleva la palma.
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Psicofármacos: Sin llegar a las cotas de los anteriores, algunos como la codeína (analgésico) y los ansiolíticos son muy demandados. A menudo se utilizan como drogas recreativas.
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Abortivos: Una de las franjas más sórdidas de la red. El mejor ejemplo es el Cytotec, medicamento autorizado para úlceras y lesiones gastrointestinales pero usado clandestinamente como abortivo. En internet es especialmente buscado en países con poca cultura anticonceptiva, como Bolivia y Filipinas.
La OCU ha analizado el lugar al que van los consumidores cuando indagan en internet: Google. El buscador de referencia ha sido el escenario en el que llevar a cabo buena parte de la investigación. Hemos realizado más de 2.300 búsquedas introduciendo los nombres y términos asociados de los medicamentos más demandados en la red.
Hay 400 páginas actuando en España
Hemos detectado 400 páginas que operan ilegalmente en nuestro país. Más de 300 se dedicaban a promocionar el comercio de fármacos que requerían receta y redirigir hacia páginas de venta. Un total de 81 fueron identificadas como vendedoras directas de medicamentos.
No solo actuaban con impunidad y ponían en peligro la salud del consumidor. Además, el 24% de estas páginas tenía acuerdos comerciales con Google. Los dueños de la web pagaban dinero a Google a cambio de que este les colocase en los primeros puestos de los resultados de búsqueda, formando parte de sus "enlaces patrocinados".
Afortunadamente, nuestro estudio ha servido para que la AEMPS entrase en acción. Desde entonces, el número de páginas ilegales patrocinadas por Google ha caído de 97 a 8.
Habla el experto: "Comprar un fármaco online es sencillo"
La ardua tarea de rastrear la red e identificar las páginas ilegales fue llevada a cabo por un especialista en marketing online y comercio electrónico de reputada trayectoria. "Es una zona oscura de internet, como pueden serlo el mundo de las apuestas y el contenido para adultos", comenta este especialista. Navegó por miles de web y se comportó como un consumidor que quería engañar al sistema ("si hacía falta mentir, mentía") para hacerse con Viagra, Reductil, Cytotec...
Pagó con tarjeta y recibió por correo todo tipo de fármacos por los que deberían haberle exigido receta médica. "Es preocupante lo sencillo que resulta. Es más fácil comprar una caja de Viagra que un billete de tren a Zaragoza".
El 15% del spam que circula por internet está relacionado con la venta de fármacos, según datos del antivirus Kaspersky. Pese a la contundente cifra, sigue habiendo quien facilita información personal a este sector que se mueve en zonas oscuras a las que la legalidad no llega. Además del correo electrónico (con el inevitable spam), muchas páginas piden datos más sensibles, como el historial médico. Esta información puede después ser utilizada para otros fines o vendida al mejor postor.
Un sector ilegal pero en auge: 10% de crecimiento anual
"Siempre hay que tener cuidado cuando se navega, pero mucho más cuando se navega por los bordes", resume nuestro especialista para referirse a la tierra fronteriza en la que se encuentra la venta online de medicamentos. "Te encuentras de todo. El 25% de las páginas que identificamos operaban desde Andorra, donde están muy profesionalizados. También hay tiendas internacionales. Y por supuesto todo un pequeño mar de menudeos: alguien a quien le han sobrado dos cajas de un abortivo y quiere venderlo, alguien que te dice que le pidas lo que quieras y él te lo consigue...".
Internet garantiza el anonimato para ambas partes, la ausencia de preguntas incómodas, pero deja al consumidor sin garantías, sin seguridad, sin privacidad. La mejor defensa es estar informado y ser responsable, ya que el sector no da muestras de agotamiento. "El comercio electrónico en España está experimentando un boom que se notará también en estas actividades ilegales. Calculo que, en un año, las farmacias online estarán ganando un 10% más", sentencia nuestro experto en e-commerce.
Lejos de farsantes se vive mejor
Para estar seguro y saber con lo que te curas, elije una farmacia de las de toda la vida. A día de hoy siguen siendo las únicas que ofrecen garantías. Aléjate de quien te ofrezca medicamentos que requieren receta sin pedírtela. Al hacer esto, el vendedor se sitúa fuera de la ley. ¿De verdad quieres tener tratos con un mercader clandestino?
No ayudes a enriquecerse a quien gestiona chiringuitos de dudosa reputación. Los mismos que en mayo de 2011 vendieron Melatonan (un bronceador que incluye cáncer de piel entre sus efectos secundarios) a dos jóvenes de Valencia que tuvieron que ser hospitalizados por melanoma y repentina aparición de lunares. En aquella ocasión la AEMPS consiguió que se retirasen varios anuncios online de este peligroso producto.
Por no hablar de misteriosos suplementos que ocultan potentes fármacos en su interior, como el adelgazante Fruta Planta Reduce Weight, retirado por la AEMPS de las tiendas en octubre de 2010. No figuraba en su etiqueta, pero el principio activo era sibutramina, un estimulante prohibido en Europa que puede causar serios problemas cardiovasculares.