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Tintes naturales, la henna y poco más

09 abril 2015
polvos de henna

Los tintes sintéticos son los más usados, pero muchas personas buscan en los tintes naturales una alternativa a las coloraciones químicas permanentes, más agresivas y con ingredientes más "sospechosos". El problema es que la oferta es muy limitada. 

Si huyes de las coloraciones químicas permanentes porque son agresivas y piensas que deterioran el cabello, o porque en su composición incluyen sustancias químicas cuestionadas, o porque pueden provocarte una alergia... probablemente pienses que los tintes naturales son la alternativa. Y es cierto, pero también lo es que la oferta es muy limitada, apenas existen plantas con propiedades tintóreas y sus resultados no pueden competir en eficiencia contra los tintes químicos, que son mejores en duración, permiten conseguir el tono deseado, resultados fáciles de predecir y encima proporcionan una alta cobertura de las canas.

El maquillaje "verde" de los tintes químicos

Como asociamos lo natural a más sano, más ecológico y más seguro, los fabricantes se aprovechan de ello, y venden tintes con nombres que incluyen prefijos como “natural”, “herbal”, con dibujos en los envases que evocan la naturaleza o la presencia de plantas o con frases que incluyen las palabras natural, naturaleza, no testado en animales, etc. , pero en realidad en su gran mayoría son coloraciones químicas permanentes que encontramos sobre todo en grandes superficies, aunque también en herbolarios y farmacias.

A veces esos tintes químicos para no parecer tan agresivos dicen prescindir de amoniaco o incorporar ingredientes de origen natural como aceites o proteínas de plantas que ayudan a la protección o reparación capilar. Pero todos ellos basan su acción colorante en un proceso químico de oxidación cuyos tres ingredientes principales son: el agua oxigenada (o peroxido de hidrógeno), los colorantes de oxidacion, y un agente alcalino (frecuentemente etanolamina en sustitución del amoniaco).

Juegan a confundir al consumidor

Nada impide a los fabricantes jugar a la confusión con la cosmética "natural" porque falta una normativa al respecto. Hasta ahora solo hay algunos certificados voluntarios, privados, como el europeo COSMOS (COSMetic Organic Standard). A grandes rasgos lo que exige COSMOS es un porcentaje de ingredientes de origen natural entre el 50 y el 95% (potenciando los de agricultura ecológica) y permite ingredientes sintéticos cuando no exista alternativa. 

Por eso, OCU junto a otras asociaciones de consumidores, lleva exigiendo desde 2009 una definición clara del calificativo “natural” que incluya la calidad y cantidad de sus ingredientes; así como un control sobre el impacto ambiental de su producción, transporte, embalaje, etc.

Para saber si un cosmético es natural, tendrás que leer su lista de ingredientes

  • Debe destacar en los primeros lugares la presencia de algún extracto de plantas (en latín), por ejemplo,  “Prunus amygdalus dulcis oil”, que es el aceite de almendras dulces. 
  • No deben llevar ni parafinas ni aceites minerales derivados del petróleo, ni siliconas. 
  • También deben prescindir de conservantes como los parabenes o los liberadores de formaldehído, y de antibacterianos como BHT, BHA o triclosán, de los que hemos advertido en otras ocasiones.

Mientras exista esta indefinición de lo que es "natural", no te dejes engatusar por las imágenes o los mensajes en los etiquetados: lee la letra pequeña

Naturales de verdad, la henna y poco más

Los tintes naturales más usados son los que se elaboran con henna u hojas de alheña, una planta cultivada desde el norte de África a la India. La henna modifica el tono de modo semipermanente, ya que su efecto dura entre 4 y 8 semanas. No permite aclarar el cabello y ofrece una limitada gama de colores: oscuros y rojizos. Se suele vender en herbolarios, sobre todo en polvo, pero también existe en crema. Si es en polvo habrá que mezclarla con agua hirviendo y y luego dejarla enfriar antes de aplicársela.

Para saber si un producto es o no henna 100% , en la lista de ingredientes aparecerá por su nombre que es Lawsonia inermis.    

  • La henna no se recomienda para cabellos canos o rubios porque el tono final puede tirar a verde.
  • Tampoco se aconseja sobre un cabello teñido anteriormente con tintes químicos porque es difícil de pronosticar el tono final. Y lo mismo pasa al contrario, cuando se quiere aplicar un tinte químico después de una coloracion con henna.

En ambos casos podemos probar solo en un mechón, de la nuca, por ejemplo, que va a quedar tapado si el resultado no es idóneo.

Vegetal no significa inocuo

La henna también puede producir alergias. Además, la henna negra, utilizada para tatuajes temporales: contiene parafenilendiamina, que puede producir alergias graves y sensibilizaciones cutáneas.