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Ejercicio físico, ¿un remedio para el dolor de la regla?

23 julio 2021
muchacha corriendo

El dolor menstrual es un problema para muchas mujeres, que cada mes sufren calambres, cólicos y espasmos en ocasiones tan intensos que llegan a afectar a su calidad de vida. Una revisión Cochrane apunta a que el ejercicio físico podría se eficaz para disminuir el dolor provocado por la regla.

Muchas mujeres sufren reglas dolorosas. Cada mes, dolores cólicos, calambres y otros síntomas afectan a su ritmo de vida. Hay evidencia que sustenta que el ejercicio físico regular y constante, de cualquier intensidad, puede contribuir a mejorar los dolores menstruales.

¿Cuál es la causa del dolor menstrual?

El dolor menstrual se produce debido a un aumento en los niveles de prostaglandinas durante la menstruación. Las prostaglandinas son una especie de hormonas que ejercen muchas funciones diferentes en nuestro organismo, entre ellas, la contracción del útero durante el parto. También son las responsables de la contracción del útero durante las reglas. Estas contracciones son las que permiten la expulsión de la capa endometrial cuando no se produce la fecundación del óvulo y son las causantes del dolor típico en forma de calambres que muchas mujeren sienten en el momento de la menstruación.

Cochrane: buscando la evidencia científica

Se ha postulado que el ejercicio físico, a través de diferentes mecanismos, podría disminuir la cantidad de prostaglandinas que se producen durante la regla. De ser así, se podría concluir que el ejercicio físico podría convertirse en una medida eficaz contra el dolor menstrual. Esto es precisamente lo que se plantearon averiguar los autores de una revisión sistemática Cochrane publicada en 2019.  

¿Qué halló la revisión Cochrane?

La revisión encontró doce ensayos clínicos, con un total de 854 participantes, en los que se medía la intensidad del dolor menstrual en mujeres que habían realizado ejercicio físico de forma regular (45-60 minutos al menos tres veces a la semana), ya fuera ejercicio de alta intensidad (zumba, aerobic) o de baja intensidad (yoga, estiramientos), comparándolas con mujeres que no habían realizado ejercicio físico alguno.

La revisión encontró que, efectivamente, el ejercicio físico disminuía el dolor menstrual de forma importante.

Sin embargo, la revisión no encontró evidencias suficientes para saber si, además del dolor menstrual, el ejercicio físico mejoraba otros síntomas como el dolor de espalda, el cansancio, o la calidad de vida de los participantes.

¿Cuál es el grado de certeza de estos hallazgos?

El grado de certeza de la evidencia científica, es decir, de los resultados de los estudios depende de la calidad metodológica de los ensayos clínicos revisados. En este caso, el grado de certeza sobre la eficacia del ejercicio físico para reducir el dolor menstrual es bajo. Esto quiere decir que, aunque se ha observado una reducción del dolor, estos resultados no ofrecen suficiente confianza y probablemente nuevos estudios aporten resultados diferentes.

¿Cuál es la conclusión?

Realizar ejercicio físico, independientemente de su intensidad, durante 45-60 minutos al menos 3 veces a la semana, podría reducir de manera importante el dolor menstrual, pero hacen falta estudios de mayor calidad para confirmarlo con mayor grado de certeza.

No obstante, dado los beneficios generales sobre la salud de realizar ejercicio físico y sus pocos efectos adversos, el ejercicio físico como intervención para el manejo del dolor menstrual puede ser una opción para las mujeres a tener en cuenta.