Secadoras: cambios a mejor
En poco tiempo se han hecho un hueco en nuestros hogares, y no es para menos: sus prestaciones técnicas, su eficiencia y sus resultados han mejorado sustancialmente en los últimos años. ¿Buscas una? Te ayudamos a elegir... y a acertar.
Cada vez son más los hogares que cuentan entre su equipamiento con una secadora. Muy útil, casi imprescindible para quienes viven en en climas húmedos o para quienes no disponen de un tendedero en su casa, cada vez son más quienes recurren a este electrodoméstico. Según nuestros datos, un 29% de los hogares ya tiene una secadora.
Grandes cambios en 5 años
Para lo que es habitual en un gran electrodoméstico, el de las secadoras es un mercado dinámico, que ha evolucionado rápidamente en poco tiempo, básicamente debido a la irrupción de la tecnología de bomba de calor y los cambios en las prestaciones de estos aparatos.
- Los modelos de condensación son los más vendidos.
- La tecnología con bomba de calor (más cara, pero más eficiente, al ahorrar en el consumo) tiene cada vez más éxito: son así ya el 40% de las secadoras de condensación.
- La carga máxima también se ha incrementado: apenas hay ya modelos de 6 kg y van surgiendo otros de 9 kg. Sin duda los fabricantes se están esmerando para ofrecer solución a un problema típico de las secadoras, que era el no poder secar toda la colada de la lavadora. Los nuevos modelos de secadoras se van alineando con alta capacidad que ofrecen las lavadoras.
- En cuanto a la eficiencia energética, la directiva de Ecodiseño ha implicado mejoras son muy notables: apenas quedan modelos de clase C, mientras que se imponen las secadoras con etiqueta A+ y A++
¿Y en nuestros análisis?
¿Qué dice el laboratorio? Nuestras últimas comparativas revelan que hay los programas no son tan exactos: los ciclos no siempre ajustan el secado al punto deseado, y no terminan dejando la misma humedad en la ropa. Sin embargo, una baza a favor es la mayor uniformidad: las distintas prendas de ropa se secan más por igual, dejando un grado de humedad muy parecido entre ellas.
Otro aspecto positivo es que ha disminuido la cantidad de arrugas generada en la ropa. También los programas de secado son ahora algo más cortos que hace unos años.
Elige una de las mejores secadoras
Cada vez son más los hogares que cuentan entre su equipamiento con una secadora. Muy útil, casi imprescindible para quienes viven en en climas húmedos o para quienes no disponen de un tendedero en su casa, cada vez son más quienes recurren a este electrodoméstico. Según nuestros datos, un 29% de los hogares ya tiene una secadora.
Grandes cambios en 5 años
Para lo que es habitual en un gran electrodoméstico, el de las secadoras es un mercado dinámico, que ha evolucionado rápidamente en poco tiempo, básicamente debido a la irrupción de la tecnología de bomba de calor y los cambios en las prestaciones de estos aparatos.
- Los modelos de condensación son los más vendidos.
- La tecnología con bomba de calor (más cara, pero más eficiente, al ahorrar en el consumo) tiene cada vez más éxito: son así ya el 40% de las secadoras de condensación.
- La carga máxima también se ha incrementado: apenas hay ya modelos de 6 kg y van surgiendo otros de 9 kg. Sin duda los fabricantes se están esmerando para ofrecer solución a un problema típico de las secadoras, que era el no poder secar toda la colada de la lavadora. Los nuevos modelos de secadoras se van alineando con alta capacidad que ofrecen las lavadoras.
- En cuanto a la eficiencia energética, la directiva de Ecodiseño ha implicado mejoras son muy notables: apenas quedan modelos de clase C, mientras que se imponen las secadoras con etiqueta A+ y A++
¿Y en nuestros análisis?
¿Qué dice el laboratorio? Nuestras últimas comparativas revelan que hay los programas no son tan exactos: los ciclos no siempre ajustan el secado al punto deseado, y no terminan dejando la misma humedad en la ropa. Sin embargo, una baza a favor es la mayor uniformidad: las distintas prendas de ropa se secan más por igual, dejando un grado de humedad muy parecido entre ellas.
Otro aspecto positivo es que ha disminuido la cantidad de arrugas generada en la ropa. También los programas de secado son ahora algo más cortos que hace unos años.