Como elegir quesos semicurados
Descubre toda la información que necesitas saber sobre lácteos
Comparamos cuñas de queso semicurado de mezcla para ayudarte a escoger el producto que prefieras.
Queso, el rey de los lácteos
Analizamos 17 cuñas de quesos semicurados de mezcla (hechos con leche de vaca, oveja y cabra).
La proporción de cada tipo de leche varía según la marca:
- La leche de vaca aporta acidez.
- Las leches de oveja y cabra aportan un aroma más intenso y una textura mantecosa.
En cualquier caso, un mayor porcentaje de una u otra no determina una mayor calidad
Tipos de queso
Hay muchos quesos diferentes que pueden clasificarse de distintas maneras.
Tipo de pasta
Queso de pasta prensada. En este grupo se encuentra la mayoría de los quesos nacionales. La paste del queso se prensa para darle forma y se deja madurar
Quesos de pasta prensada y cocida. Son quesos que tras el prensado, son sometidos a calor para que la pasta quede muy consistente, en este grupo estarían quesos muy conocidos como el Emmental o el Gruyere
Quesos de pasta veteada. Son los tradicionales quesos azules que se consiguen por el crecimiento de un moho, aquí encontramos quesos como el Cabrales o el de Valdeón.
Quesos de pasta enmohecida. Son quesos de pasta blanda recubiertos de moho blanco, como el Brie o el Cammembert.
Maduración del queso
El tipo de maduración condiciona el sabor del queso y su duración. La maduración es un proceso imprescindible que sufre el queso que puede ir desde una semana hasta los 9 meses. Durante esta maduración, el queso va cambiando sus características y liberando aromas y sabor.
En función del tiempo de maduración los quesos se clasifican en:
Tierno: alrededor de una semana.
Semicurado: de 7 a 35 días.
Curado: de 35 a 105 días
Viejo: de 105 a 180 días.
Añejo: de 180 a 270 días.
Acierta al comprar tu queso
Antes de nada, si optas por los quesos semicurados, consulta nuestro comparador para ver los resultados.
Compara y elige tu queso semicurado
Acertarás si tienes en cuenta estos consejos:
- Elige una tienda con una buena rotación de producto.
- Si es semicurado o curado aguantará semanas, mientras que los frescos hay que consumirlos lo antes posible.
- Asegúrate de que compras un queso que no esté ya reseco y que la corteza esté intacta (sin fisuras o cortes que podrían afectar a su calidad y seguridad).
- La etiqueta es una buena fuente de información sobre el origen, el tipo de leche (pasteurizada o cruda), la curación o la mezcla entre distintos tipos de leche (oveja, vaca, cabra).
- Si vas a comprar una marca por primera vez, es aconsejable hacerlo en una tienda donde pueda probar el queso antes.
Valora el precio
Si vas a comprar un queso fíjate bien en el precio. Hay grandes diferencias de precio para quesos de una misma marca, incluso en la misma cadena. Si bien es cierto, que esto también se debe a que las cuñas no siempre se cortan y envasan en origen por el productor. Además, el peso habitual puede variar de una pieza a otra.
Comer queso, ¿sí o no?
El queso es un alimento con importante valor nutricional, pues es rico en calcio (una ración de 30 g aporta el 30% de las necesidades diarias), y tiene muchas proteinas... pero también es un producto rico en grasa saturada y con mucha sal.
Esto hace que, aunque su consumo sea recomendable, como el de los demás lácteos, deba hacerse con moderación, y priorizando sobre el resto las variedades con menos sal y meno grasa (como el queso fresco, por ejemplo).
Preguntas frecuentes sobre queso
¿Qué es el queso ibérico?
Reciben la denominación de "ibérico" unos quesos de mezcla de leche que respetan una determinada proporción en las cantidades de cada tipo: no más del 50% de leche de vaca, y no menos del 15% de leche de oveja y 15% de leche de cabra. Algunos de los quesos del estudio llevan el apellido "ibérico": comprobamos que tienen todo el derecho a hacerlo por la composición de la leche.
¿Cuántos lácteos hay que consumir?
Idealmente habría que consumir unas 3 raciones de leche o lácteos a diario. Una ración de lácteo equivale a un vaso de leche de 250 ml, dos yogures o leche fermentada sin azúcares añadidos, una porción de queso, si es fresco, unos 100 g, pero menos si es queso de pasta blanda o curado.
¿Dónde y cómo conservar el queso?
Las temperaturas altas aceleran los procesos madurativos. Por eso, una vez comprado, el mejor sitio para conservar el queso es en una alacena fresca, en la nevera, en su envase original (si no se ha abierto) o envuelto en papel film.
¿Cuál es el mejor queso?
7 de los 17 quesos semicurados del análisis merecen una buena valoración del conjunto de su calidad, algo para lo que hemos tenido en cuenta tanto la composición (tipo de lche, presencia de aditivos...), como la higiene o el etiquetado... además de la degustación por un panel de expertos catadores. La nota más alta va para la cuña semicurada de Carvel.