FONDO DE COMERCIO

Cuando una sociedad lleva a cabo adquisiciones, paga por estas compras un precio determinado. Este precio no refleja necesariamente el valor contable de la firma adquirida. La sociedad compradora puede aceptar un precio más elevado porque la sociedad adquirida comercializa una marca importante, constituye una imagen emblemática, goza de una clientela ventajosa, ofrece posibilidades de crecimiento tales que la adquisición supone una apuesta por un futuro provechoso.

El precio adicional es el Fondo de Comercio (goodwill en la terminología anglosajona).

El Fondo de Comercio se incluye en el balance de la compañía y es objeto a menudo de un plan de amortización del fondo de comercio: cada año, la cantidad disminuye en una cierta medida. Pero si la adquisición realizada no cumple todas sus perspectivas, los gestores pueden decidir amortizarlo más rápidamente (ya que el gasto realizado lastra en mayor medida los resultados). En este caso, el valor contable de la sociedad puede reducirse drásticamente, y la cotización resentirse por ello. La presencia de un fondo de comercio importante en un balance es por tanto un factor que aumenta el riesgo.