Minicréditos = maxiabusos

Desde hace algunos meses proliferan por internet empresas que ofrecen créditos de muy pequeñas cuantías, normalmente no más de 300 €, a devolver en plazos muy cortos (30 días es lo habitual). Cuidado con ellos.

Dinero fácil ¡y muy caro!

Las empresas que conceden estos microcréditos prácticamente no exigen garantías: basta con tener una cuenta corriente y disponer de un teléfono móvil. La aprobación es inmediata, y en el mismo día que lo solicitas te mandan el dinero a tu cuenta.

Pero las condiciones que ofrecen son absolutamente desaconsejables. Por disponer de 300 euros durante 30 días, cobran comisiones que superan los 90 euros, lo que supone pagar una TAE que ronda el 3.000%.

No caigas en la tentación

Estos pequeños créditos están dirigidos a personas con problemas económicos… pero “picar” y solicitar uno puede ser muy contraproducente.

• Los intereses son muy elevados: por 300 € en 30 días, pagarás 390.
• En caso de impago te cargarán comisiones e intereses adicionales que harán que la deuda se dispare rápidamente: si no pudieras pagar esos 390 € , la deuda podría aumentar a razón de 5 euros por cada día de retraso, por lo que a los dos meses del impago deberías unos 700 € aproximadamente, y en seis meses, 1500 €.
• A esto se unirá la inclusión en el registro de morosos y la posible venta de la deuda a una empresa de recobros, muchas de las cuales utilizan prácticas en los límites de la legalidad para presionar a los deudores, o bien acabar en los tribunales de justicia.

Si necesitas dinero, hay otras alternativas más seguras y menos gravosas.

Bajo sospecha

Estos minicréditos suelen ser concedidos por empresas que no son entidades de crédito. No obstante, sí están obligadas a cumplir una serie de requisitos de transparencia, como tener a disposición de los consumidores las condiciones generales de contratación, disponer de un libro de tarifas y gastos repercutibles y de un tablón de anuncios con toda la información, etc. Además, cuando en su publicidad se hace referencia a cualquier cifra relacionada con el coste del préstamo, deben incluir la TAE con un ejemplo. Comprobamos que no todas las empresas cumplen siempre estas exigencias.

Desde OCU alertamos a los consumidores sobre los evidentes riesgos de estos microcréditos rápidos, y pedimos a las autoridades que extremen su control para asegurarse de que cumplen los requisitos de transparencia e información que les son exigibles.