Cómo instalar el cilindro de una cerradura
Si necesitas cambiar la cerradura de la puerta de entrada de tu casa porque se ha estropeado, cambias de inquilino, has perdido las llaves o peor, te las han robado, o simplemente porque quieres potenciar tu seguridad, te animamos a que lo hagas tú mismo. Tan solo has de seguir estos consejos.
Si ha llegado el momento de cambiar el cilindro de la cerradura de la puerta de tu casa, plantéate hacerlo tú mismo. Se trata de una operación sencilla que te ahorrará gastarte en un cerrajero más de 50 euros. Cualquiera podría hacerlo, aunque no se sea un manitas, ya que el cilindro es un formato universal para que sea fácil cambiarlo. ¿Te animas a hacerlo? Mira el vídeo.
Paso por paso
- 1. Desatornilla el cilindro de la cerradura. Con la puerta abierta, busc en el canto de la puerta el tornillo que se encuentra a la altura de la base del cilindro. Es solo un tornillo. Usa el destornillador adecuado (seguramente de estrella Phillips), y lo normal es que no necesites quitar nada más. El embellecedor tiene el hueco exacto para extraerlo sin problema.
- 2. Extrae el cilindro por el lado de dentro. Inserta la llave y gírala ligeramente para alinear la leva (una pieza que sobresale en la zona central del cilindro) con el cilindro, hasta que el bloque salga sin esfuerzo. El desencaje debe hacerse con suavidad por el lado de dentro de la puerta, sin forzarlo. Fíjate en el lado que queda la leva cuando la llave está en horizontal para que el nuevo cilindro quede con la misma orientación.
- 3. Mide la longitud. Una vez que ya tienes el cilindro viejo en la mano mide la longitud total y la longitud de las dos mitades desde el extremo al centro, lo normal es que sea simétrico pero también puedes ser mitades distintas. Ve a la ferretería para pedir el modelo que quieres y con las medidas apropiadas.
- 4. Introduce el nuevo cilindro. No será necesario recurrir a la fuerza ni usar ninguna herramienta. Inserta la llave por el lado del cilindro que deja la leva cuando la llave está horizontal en el mismo lado en que estaba el antiguo y gírala hasta que quede alineada con el cuerpo del cilindro e introdúcelo en su sitio por la parte interior de la puerta. Evita forzar la entrada usando un martillo, puede dañar la cerradura.
- 5. Atornilla usando un destornillador manual, nunca uno eléctrico para evitar forzar la rosca.
- 6. Misión cumplida. Antes de cerrar la puerta comprueba por dentro y por fuera que el cilindro gira con la llave y todo funciona bien. Si todo es correcto, los pestillos salen y entran completos, y el resbalón se abre y se cierra sin problemas, cierra la puerta, comprueba antes por dentro que todo funciona y, si es así, luego prueba por fuera. Para esta comprobación sería ideal que hubiera dos personas, una fuera u y otra dentro. Por si acaso.
Las mejores cerraduras
La cerradura debe contar, en el lado de la calle, con un escudo de seguridad que proteja el cilindro. Si tienes dudas sobre la solidez del escudo consulta con un cerrajero. Esta operación ya es más complicada y se necesitan mayores conocimientos.
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- 2. Extrae el cilindro por el lado de dentro. Inserta la llave y gírala ligeramente para alinear la leva (una pieza que sobresale en la zona central del cilindro) con el cilindro, hasta que el bloque salga sin esfuerzo. El desencaje debe hacerse con suavidad por el lado de dentro de la puerta, sin forzarlo. Fíjate en el lado que queda la leva cuando la llave está en horizontal para que el nuevo cilindro quede con la misma orientación.
- 3. Mide la longitud. Una vez que ya tienes el cilindro viejo en la mano mide la longitud total y la longitud de las dos mitades desde el extremo al centro, lo normal es que sea simétrico pero también puedes ser mitades distintas. Ve a la ferretería para pedir el modelo que quieres y con las medidas apropiadas.
- 4. Introduce el nuevo cilindro. No será necesario recurrir a la fuerza ni usar ninguna herramienta. Inserta la llave por el lado del cilindro que deja la leva cuando la llave está horizontal en el mismo lado en que estaba el antiguo y gírala hasta que quede alineada con el cuerpo del cilindro e introdúcelo en su sitio por la parte interior de la puerta. Evita forzar la entrada usando un martillo, puede dañar la cerradura.
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