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Los dependientes siguen esperando sus ayudas

05 febrero 2015

La mitad de los dependientes no recibe ninguna ayuda. Decenas de miles de enfermos esperan a recibir la atención que se les ha reconocido. Entre tanto, el peso recae en los familiares cuidadores, que asisten impotentes a una situación que lejos de mejorar, empeora cada día. 

La Ley de Dependencia aprobada en 2006 supuso una importante mejora en la atención y promoción de personas con limitaciones físicas, psíquicas o sensoriales que dependen de otros para desenvolverse en su vida diaria. Cientos de miles de personas se benefician de las ayudas previstas en la Ley… pero muchos otros dependientes siguen esperando una ayuda que no llega. OCU ha realizado una encuesta entre dependientes, familiares y cuidadores que refleja la situación real.

Distintos dependientes, distintas soluciones

Hay tres grados de dependencia:

  • Moderada o Grado 1, la de las personas  que necesitan de forma intermitente ayuda para realizar actividades básicas.
  • Severa o Grado 2, estos dependientes necesitam apoyo de un cuidador dos o tres veces al día.
  • Gran dependencia o Grado 3, personas que han perdido totalmente su autonomía y necesitan ayuda básica constantemente.

En función del grado de dependencia, se estipula la ayuda, que puede ser económica (como ayuda familiar) o en servicios (de una residencia, a un centro de día, asistencia a domicilio, teleasistencia…).

El problema es que no todos los dependientes que tienen derecho a recibir las ayudas las reciben efectivamente: más de 170.000 dependientes siguen esperando la ayuda. 

La mitad de los dependientes, sin ayudas

OCU ha realizado una encuesta entre personas en situación de dependencia, sus familiares y sus cuidadores. Las más de 850 respuestas ponen de relieve que la situación no es buena, y ha empeorado en los últimos años.

  • La mitad de quienes dependen de otros para desenvolverse no reciben las ayudas estipuladas por la ley: según la encuesta de OCU, no reciben ningún tipo de ayuda el 41% de los grandes dependientes, el 51% de los dependientes severos ni el 60% de los moderados.
  • Casi el 20% de los dependientes opina que no está bien atendido y un 34% considera que dicha atención podría ser mejor.

La Administración también da datos, y sus cifras son contundentes: solo un 56% de las solicitudes de dependencia son aceptadas, y de ellas solo el 45% son atendidas. El resultado, cientos de miles de personas sin ninguna ayuda.

Las familias sí responden

Solo un 10% de los encuestados tiene capacidad económica para no necesitar ningún tipo de ayuda por parte de las administraciones públicas. Sin embargo, las ayudas son cada vez menores, y los requisitos para acceder a ellas, cada vez más duros. Los recortes presupuestarios los sufren tanto los dependientes como sus familias: los familiares cuidadores han dejado de beneficiarse de la exención de la cotización a la Seguridad Social, con lo que el 90%  de esos cuidadores se ha visto obligado a darse de baja.

Sin embargo, como revela la encuesta de OCU, pese a los recortes, la familia sigue siendo el principal apoyo de los dependientes. De hecho, 7 de cada 10 encuestados vive con familiares. Y la familia se ocupa de ellos, hasta el punto de que el 21% de los familiares dejan su trabajo o reducen su jornada para cuidar al enfermo. También es habitual que los familiares se muden a casa del dependietne u opten por acogerlo en su vivienda.

Desde OCU, insistimos en la gravedad de este problema y en la necesidad de adoptar medidas encaminadas a resolverlo