La UE quiere IVA reducido para más productos
La Comisión Europea espera aprobar una propuesta que permitirá a los Estados de la UE ampliar la lista de productos con IVA reducido. En OCU creemos que la propuesta es beneficiosa para el consumidor, aunque debería conllevar un seguimiento de los precios que los comerciantes aplican.
La Comisión Europea tiene previsto aprobar la semana próxima una propuesta que permitirá a los Estados miembros de la Unión Europea ampliar la lista de productos con IVA reducido, o crear un nuevo listado fijando un impuesto más reducido.
Si esta propuesta logra el visto bueno de la Comisión, aún debería pasar por el Parlamento y el Consejo de la UE para entrar en vigor. Así, todavía es pronto para que los países puedan contar con esta nueva herramienta de estímulo al consumo.
El 1 de septiembre de 2012 entró en vigor la última subida de IVA, medida que buscaba un aumento de la recaudación para atajar el déficit público.
La subida de 2012, aunque mantuvo en el 4% el IVA superreducido, aplicable a productos básicos como el pan, los huevos, la leche o la fruta, aumentó del 8% al 10% el IVA reducido, el que se aplica, por ejemplo, a la mayor parte de los alimentos.
En OCU calculamos en su momento que el incremento del IVA suponía una subida media de 470 euros al año en el gasto familiar.
Bueno para el consumidor
Los impuestos indirectos, como ocurre con el IVA, gravan el consumo, razón por la cual recaen directamente sobre el consumidor. Por ello, consideramos que la propuesta de la Comisión Europea de permitir a los Estados ampliar la lista de productos a los que se puede aplicar tipos reducidos de IVA es beneficiosa para el consumidor.
Sin embargo, la inclusión de nuevos productos a los que se aplican tipos reducidos debería ir acompañada de un seguimiento de los precios que los comerciantes aplican al consumidor final, que permita comprobar que dicha bajada de tipos realmente llega a los consumidores o simplemente sirve para aumenta los márgenes de beneficio de fabricantes y vendedores.
La Comisión Europea tiene previsto aprobar la semana próxima una propuesta que permitirá a los Estados miembros de la Unión Europea ampliar la lista de productos con IVA reducido, o crear un nuevo listado fijando un impuesto más reducido.
Si esta propuesta logra el visto bueno de la Comisión, aún debería pasar por el Parlamento y el Consejo de la UE para entrar en vigor. Así, todavía es pronto para que los países puedan contar con esta nueva herramienta de estímulo al consumo.
El 1 de septiembre de 2012 entró en vigor la última subida de IVA, medida que buscaba un aumento de la recaudación para atajar el déficit público.
La subida de 2012, aunque mantuvo en el 4% el IVA superreducido, aplicable a productos básicos como el pan, los huevos, la leche o la fruta, aumentó del 8% al 10% el IVA reducido, el que se aplica, por ejemplo, a la mayor parte de los alimentos.
En OCU calculamos en su momento que el incremento del IVA suponía una subida media de 470 euros al año en el gasto familiar.
Bueno para el consumidor
Los impuestos indirectos, como ocurre con el IVA, gravan el consumo, razón por la cual recaen directamente sobre el consumidor. Por ello, consideramos que la propuesta de la Comisión Europea de permitir a los Estados ampliar la lista de productos a los que se puede aplicar tipos reducidos de IVA es beneficiosa para el consumidor.
Sin embargo, la inclusión de nuevos productos a los que se aplican tipos reducidos debería ir acompañada de un seguimiento de los precios que los comerciantes aplican al consumidor final, que permita comprobar que dicha bajada de tipos realmente llega a los consumidores o simplemente sirve para aumenta los márgenes de beneficio de fabricantes y vendedores.